Johana Fernández Martínez, afectada por las tomo vacunas AstraZeneca y Pfizer, San Vicente del Raspeig, Alicante.
Lo primero Muy Feliz Año 2023, Salud y Justicia para y por los Adversos para sus familiares, a nuestros familiares que sobrellevan como buenamente pueden y saben nuestras montañas rusas emocionales… que no son pocas.
El mar es nuestro nexo de unión y el que nos recompone. Después de una tempestad llega la calma, un punto y aparte, un nuevo año, tener proyectos juntos y encontrarnos de nuevo. Tirar lo que no sirve, lo que me pesa, ese montón de piedras que llevaba atadas a mis pies y no me dejaba salir a la superficie, ordenar, humildad…no somos fáciles los Adversos.
¿Qué le puedo yo decir a un familiar de un Adverso que intenta ayudarle?, ¿qué le puedo yo decir a un Adverso que está en fase de asimilación de lo que le ha ocurrido?
Es durísimo asimilar, aceptar uno mismo que nos hemos inmolado, que nosotros mismos pusimos el brazo para meternos en el buen lío en el que estamos, que muchos no han salido con vida y que otros miles nos hemos jodido para el resto de nuestros días.
Al familiar, a la pareja le diría, PACIENCIA, PACIENCIA y más PACIENCIA, pasamos por procesos desde la culpa, la ira, la venganza… a la tristeza infinita de que ya esa persona no será la misma porque, aunque la salud la estabilice, ya nunca será la misma y hay que aprender a querernos desde otra mirada. Darle mucha paz, tranquilidad, seguridad, estabilidad.
Al Adverso que aún está en el proceso de aislamiento, cerrado, que siente que nadie le comprende, que lo toman por un “pirado”, que por un lado siente dolores físicos indescriptibles y por otro tiene que luchar con su propio “YO”, PACIENCIA, pasará, llegarás a aceptarte con tus nuevas condiciones, no cierres la puerta si alguien te tiende una mano amiga, ¡sea quien sea! ¡cógela y te levantas!… Le diría que si no sabes aún qué es lo que se ha roto en tu cuerpo físico, ese es el primer paso, hay que encontrar el diagnóstico. La incertidumbre que genera el saber, sentir que algo está mal, que ya no funciona como antes y no saber a qué corresponde es absolutamente frustrante. Eso es lo que yo hice en primer lugar, buscar hasta encontrar el diagnóstico. Las etiquetas aquí para mí si son importantes. Y si alguien te dice toma esto, o esto otro, o lo de más allá, contrasta, que te muestren quién ha salido de ese atolladero con tu misma patología. Que también hay muchos “vende humos” aprovechando la situación.
Yo aún no he conocido a ningún Dermatomiositis con afectación pulmonar que haya salido del agujero fuera de los tratamientos que estoy llevando a cabo. Pero sí han venido a decirme qué debo y no debo tomar para curarme sin ninguna referencia de un caso exacto al mío.
Tenéis que pedir ayuda a otros Adversos que ya hemos recorrido y abierto camino. Combinar terapias, buscar un guía, elegir un capitán de barco es la enseñanza que me llevé de un internista al que le agradezco cada día esa frase que he sabido darle el sentido con el tiempo y lo más importante, toma tú solo tus propias decisiones.
Mi madre me ha dicho siempre que “nadie escarmienta por cabeza ajena”, pero me gustaría pensar que si podemos acortar el dolor sobre todo físico que producen las enfermedades que están generando las que producen las mal llamadas vacunas COVID, es todo un logro.
Personas muy bonitas que están preocupadas por sus familiares contactan conmigo, hay un paso muy importante que el Adverso tiene que dar y lo da, pero esto se da al ritmo individual de cada persona, he entendido que no podemos abrir los ojos a “golpetazos”, un Adverso los tiene abiertos, sabe que lo que le pasa es por la “vacuna” pero aceptarlo es absolutamente un trabajo personal que tiene que hacer y se necesita el tiempo. Yo lo intuí a las 24 horas, pero tardé en aceptarlo meses, de hecho, sabéis que me puse dos dosis.
Tengo el perfil de Facebook público, johannafernández33 para encontrarme en Instagram, pedir ayuda, consejos, preguntar por caminos andados, no estás solo, no estás sola y esto aunque la sociedad esté tan ciega hoy, dentro de unos años tendrán que mirarnos a la cara y preguntar qué caminos hemos andado porque por desgracia habrán muchos más que miles de Adversos y va a ser absolutamente doloroso escuchar a padres que han inoculado a sus hijos pequeños que les han generado una enfermedad autoinmune, una miocarditis… y aún viven… en el mejor de los casos, porque las muertes sin justificar continúan sucediendo sin que los gobiernos tengan las narices, la decencia de poner en la palestra que esas MUERTES están relacionadas con la vacunación.
Estos días leo este titular: El legendario base de los Utah Jazz asegura tener pruebas de lo que afirma, John Stockton arremete contra la vacuna del Covid-19: «Han muerto cerca de 1000 deportistas».
Mirar para otro lado no podrá mantenerse en el tiempo…