A sus 33 años, Darío Herrera seguía disfrutando de su gran pasión, el fútbol sala o «de salón». El viernes anotó su último gol con el equipo ‘Presidente Franco’ durante el Nacional de Fútbol de Salón Amambay 2021 pese a no encontrarse físicamente bien como él mismo declaró tras el encuentro. Horas después fue hospitalizado y en la noche de este lunes se conocía la noticia de su fallecimiento, que ha dejado en estado de ‘shock’ al deporte paraguayo y sudamericano.
Herrera, considerado uno de los mejores pívots del mundo en el fútbol de salón, el fútbol sala no dependiente de la FIFA, ganó hasta en siete ocasiones los nacionales de su país, disputó varios mundiales con su selección pero deja como mayor legado deportivo la conquista con Cerro Porteño en 2016 de la Copa Libertadores de Futsal FIFA, un torneo dominado históricamente por los clubes brasileños, y siendo además una de las figuras del equipo azulgrana en la hazaña.
El jugador fue ingresado de urgencia en el Sanatorio Manuel Riveros de Ciudad del Este, por lo que inicialmente se pensó que era un caso de dengue severo. Sin embargo, después se confirmó que la causa fue la hepatitis B. «Vino en un estado calamitoso y cuando llega en ese estado la tasa de mortalidad es muy alta», explica el parte médico del deportista.
La noticia ha provocado una profunda conmoción en el deporte paraguayo y sudamericano. Un sinfín de equipos y personalidades expresaron su dolor en las redes sociales.