Luis Bru.
Ante el rechazo general, casi unánime, Luis del Timo pliega velas. Dice que ahora las aguas se han serenado, después de agitarlas, y protagonizar algún episodio delirante como el apoyo al separatista Gabriel Rufián, pide perdón, salvo a los «magufos», palabro que no existe en el diccionario.