Coto Matamoros: «Los reyes ya no se cortan en su entrega al mal, de forma pública y descarada»

Enrique de Diego.

En un mundo que se desmorona, que tiene lugar un genocidio planetario y a grandes trazos voluntario, mantener la lucidez es un lujo que parece al alcalde de unos pocos; Coto Matamoros se encuentra entre ellos. Entrevista en profundidad, de Dios y el diablo, y sus pequeños servidores, cuando todo ha devenido en una farsa -les recomiendo la retahíla enumerada a propósito del Apocalipsis en el que estamos sumidos como exaltación de la estupidez y la mediocridad- que se aproxima, a pasos agigantados, a velocidad de vértigo. Una entrevista de la que salen mil titulares, pero ha habido elegir uno, sobre la clamorosa e impúdica entrega a satán de Felipe y Letizia:

– Me impresionó, y sé que a otra mucha gente, su afirmación, amigo Coto, de que “empezaba a ver en todo esto la mano de Dios”. Lo apuntó para ponerle en suertes, pero antes quiero que me explique su experiencia de la cárcel. Con esta mierda de Justicia y este Estado de desecho doy por supuesto que la sentencia fue injusta, y no me interesa, pero los disidentes nos ronda la penitenciaría y quiero saber qué tal se lo pasó.

Da usted bien por sentado. La sentencia encierra un acto meridiano y vergonzoso de prevaricación. Un hecho indiscutible que no importó a nadie en su día, ni creo que importe ahora. Había un interés infinito por ejemplarizar y lo hicieron. Luego, cualquier esfuerzo que realicé por denunciar el atropello resultó en vano, pues teniendo en cuenta la coherencia de la maldad, no les costó mucho aunar los deseos de venganza a políticos y huelebraguetas. Aún hoy hay malintencionados y analfabetos que afirman que fui a la cárcel por no pagar la pensión a mis hijos, cuando la verdad es que además de pagar la pensión más alta que se pagó en España durante aquellos años, cuando dejé de pagar lo hice por carecer de ingresos. Que se sepa, uno no está obligado por ley a generar ingresos y vivir como mejor convenga a los intereses de la comunidad. En mi caso resultó imperdonable que me dedicara a la contemplación teniendo un par de hijos que tenían su futuro económico asegurado en las rentas de su madre.

De forma paralela y en ese marco vacío de justicia, está la existencia del castigo que se supone la cárcel y que cualquiera reconocería como estéticamente atroz. Pero Dios nos dotó de la ironía y del humor como herramientas importantes de nuestra inteligencia y en esas circunstancias tu instinto de supervivencia las utiliza desde el minuto cero. Así mismo, el individuo, una vez colocado entre rejas y privado de libertad se va haciendo consciente de no haber perdido más que una limitada libertad física. Y sobre todo, toma consciencia de poseer un valor intrínseco en sí mismo y capta de inmediato la capacidad innata que tiene para comprometerse con su propio existir donde encuentra el mandato divino de la felicidad. Entonces, se da cuenta de que aquello es un chollo de vivienda gratuita, gimnasio, comida indecente, agua caliente, médicos y medicinas gratis, horas y horas para leer, escuchar música, jugar al ajedrez, y, sobre todo, relacionarte con personas que nunca estarían a tu alcance si no es por una situación excepcional como esa. La cárcel es una clínica de lujo que rejuvenece física y espiritualmente.  

Autoflagelación y arrepentimiento   

– Otras pregunta para ganar tiempo. Usted formó parte del circo de la televisión, de Telecirco. ¿Puede entenderse como una colaboración con el sistema?

Puede y debe entenderse de ese modo. Al punto de que creo haber adquirido una deuda impagable con la Humanidad después de haber contribuido a la zafiedad, la obscenidad y la indecencia de una sociedad que demanda a voz en cuello la extinción de la belleza. Si quería usted mi autoflagelación y arrepentimiento, ahí los tiene.

Jorge Javier Vázquez, eternamente satánico, eternamente tonto 

– Sé que es bajar el nivel mucho, pero ¿qué opinión le merece Jorge Javier Vázquez?

La noción de que la salvación de su existencia es imposible, me llena de satisfacción y me reconcilia con mi concepto de justicia divina. El satanismo es un poder exterior que controla y dirige el comportamiento de un ser cargado de prejuicios y doctrina hueca que está aquí mostrando un nihilismo tan imbécil como enfermizo a la espera de que su sinsentido acabe. Lo paradójico-maligno es que este tipo de seres trascienden en una relación eterna con el mal. Por esta razón se dan la paradoja y lo absurdo, pues la condena eterna del imbécil que deviene en satánico se confirma en un punto de la existencia totalmente temporal.  Dejando al margen a la Manolita Chen de Badalona, es lo que Kierkegaard llamó «el instante» en su dialéctica de lo temporal y lo eterno, pues, la paradoja está en que la eternidad nunca deja de ser temporal. Eternamente satánico, eternamente tonto ¡menudo panorama, oiga!

Así hablo Zaratustra

– Bueno, entramos ya en honduras teológicas, estamos entre la más cruda batalla entre el Bien y el mal, tras décadas de relativismo, “empiezo a ver la mano de Dios en todo esto”. ¿En qué sentido?

Si Dios es infinitamente bueno ¿por qué creó este mundo? Justificar el mal es un problema común a todas las religiones. Hay una rama de la teología, la teodicea (viniendo del griego significa la justificación de Dios) que se dedica a ello. La teodicea baraja diferentes tesis. Una de ellas sostiene que no hay un único Dios sino dos: el dios del Bien y el dios del Mal, que estarán en guerra entre ellos eternamente. 

La religión persa, dualista por excelencia, siguiendo a Zoroastro, en el VII antes de Cristo, postulaba la existencia de los dos dioses. Para los cristianos la verdad está en Cristo y es camino y vida -tal como quedó dicho por Él- y el demonio es el máximo portador del mal, pero no es Dios sino un puto ángel caído, que lo fue siempre hasta que en el siglo III al predicador Maniqueo, que no en vano era persa, se le ocurrió elevar al demonio a la categoría de dios.

Recuerdo que en Guatemala quemaban al diablo en unas fiestas que daban inicio a las Navidades. En todas las culturas existe la noción de esa guerra eterna y permanente. Todos, en nuestro interior tenemos consciencia de estar en esa lucha. El Universo se sostiene por un equilibrio de fuerzas que son observables, e incluso se miden, que hicieron posible su creación y hacen posible su evolución. 

A veces, como en el aikido, la cuestión está en aprovechar la inercia del contrario. El poder de autodestrucción del mal es infinito y mi idea de Dios es el de una inteligencia infinitamente superior a la suma de todas las inteligencias. Estando en la obligación de evolucionar creo que no hay otra que detener la imbecilidad autodestructiva en seco. 

A propósito de Joseph de Maistre

– Decía Joseph de Maistre que en la revolución francesa Dios había dicho para qué veáis lo que sois capaces de hacer sin mí. Ahora parece que Dios nos ha dejado de la mano de nuestra estupidez.

De Maistre, un ultraortodoxo teocrático, fue un provocador extraordinario. Hasta Ciorán, un ateo nihilista recalcitrante, ensalzó su talento y su ingenio llegando a comparar su figura con la de Nietzsche. Pero provocaciones al margen, De Maistre sabía que el libre albedrio no es una forma de abandono, es la única forma de corresponder a Dios con la observación de los principios morales. El respeto por la vida y la persecución de la virtud es un mandato consustancial a la existencia y como sostenía Hegel: «el derecho humano inalienable de darse la ley según el propio corazón».

Siempre hemos estado dejados a la libertad de nuestra inteligencia o a la de su absoluta ausencia. Lo que pasa es que ahora asistimos a una exhibición colectiva de estupidez manifiesta… son etapas.  

El sacrificio, absolutamente necesario

– Pero nos va a costar cara, un genocidio planetario con las timo vacunas en el que las víctimas acuden voluntariamente al sacrificio.

Puede resultar dolorosa la contemplación del sacrificio. Pero debemos comprender que es absolutamente necesario. El liberalismo abrazado como fe nos ha dejado una sociedad enferma que necesita vacunarse de urgencia. Hágame caso hombre, la solución es una algoritmo que da una combinación de sucesivas vacunas, contra virus reales o imaginarios, para diferentes edades. Los medios son los profetas de esta nueva religión covidicia que dejará el mundo como desean esos nuevos Marco Polo que se han introducido recientemente en China siguiendo la ruta de la nueva economía, vamos; como que van a dejar esto como una seda oriental.

– Pero sabemos que Dios no quiere eso, no quiere nuestro mal, pero respeta nuestra libertad y parece que no debería, que hacemos mal uso de ella.

Sinceramente no me atrevo ni tan siquiera a hacer una aproximación de los deseos de Dios. Me basta observar la Creación para darme una dimensión de nuestra insignificancia. Basta observar una ola para entender que es una obra maravillosa de elegancia infinita en la que sí, podemos contrastar que se producen permanentes transformaciones. Parte infinitesimal de otra parte infinitesimal de una construcción en la que nuestro diminuto conocimiento, por ejemplo, entendió que en un agujero negro y en su entorno se estaba produciendo un caos. Con posterioridad entendimos que aquello era un caos aparente y hemos acabado por entender que es parte de un orden perfecto y un motor de creación. 

Había una frase que los ignorantes repetían como papagayos: «en la medida que la ciencia avanza nos alejamos de Dios». Menuda gilipollez… En la medida que la ciencia avanza nos acercamos a una idea más concreta de Dios y de su obra. 

La libertad está en hacer el bien o elegir el mal, lo cual es parte de ese equilibrio al que antes hacía referencia. Mal uso hacemos hasta de una llave de tubo, como para emplear bien una herramienta tan poderosa y enorme como la libertad…

El Opus Dei

– Le cito a San Josemaría Escrivá de Balaguer que en 1974 escribió, y me causó honda impresión: “Se escucha como un colosal non serviam en la vida personal, en la vida familiar, en los ambientes de trabajo y en la vida pública. Las tres concupiscencias son como tres fuerzas gigantescas que han desencadenado un vértigo imponente de lujuria, de engreimiento orgulloso de la criatura en sus propias fuerzas, y de afán de riquezas. Toda una civilización se tambalea, impotente y sin recursos morales”.

Bueno, Escrivá de Balaguer que no está en mi lista de preferidos, aquí hizo una consideración histórica de una sociedad que comenzaba a desintegrarse por la renuncia explícita a los valores que la habían sostenido. Lo que no parece que acertó Mon Señor fue a tener la misma lectura crítica y acertada con una Iglesia que en interés propio, de mano de la permisividad, caminó con la sociedad por la misma senda de renuncia y autodestrucción. 

El Opus tuvo la oportunidad de haber generado una reestructuración de la política acompañado de un nuevo entendimiento estético y, lo que es más importante, haber participado en la regeneración de una Iglesia que parecía solicitarlo a voz en cuello. 

No fueron pocos los políticos de Mon Señor que colaboraron en la entrega de la sociedad española al liberalismo: Mariano Navarro-Rubio, Alberto Ullastres, Gregorio López Bravo, Juan José Espinosa, Faustino García Moncó, Laureano López Rodó, Vicente Mortes, Fernando Herrero Tejedor que fue supernumerario, Jaime Ignacio del Burgo, Oscar Alzaga y otros más que creo tuvieron un peso considerable en aquella nefasta restructuración de la vida social y política durante los últimos años de Franco y en la Transición. Un cambio de chaqueta generalizado que se caracterizó por una despreocupación suicida por el humanismo que se encierra en la filosofía y el arte. Así nos fue a nosotros, y así le fue a la secta entretenida en su pelea permanente con los jesuitas y en hacer negocios de la mano de sus grandes financieros como Valls, Molins, Ferrer Bonsoms y López Bravo.

 En manos de psicópatas

– La gente no entiende que el mundo está dirigido por psicópatas…como George Soros o Bill Gates.

La gente no sabe lo que es un psicópata. Tienen la idea de que un psicópata es un asesino en serie y de ahí no los sacas. Como mucho lo asocian a una falta de empatía. Luego, admiran a Bezos o a quien sea. Así que como para entender en manos de quién está el poder.

– Y luego están los políticos lacayos, mediocres y corruptos, y los médicos y el personal sanitario, que han cometido un asesinato, un genocidio protocolario, y han recibido el aplauso a las 8.

No tengo nada que objetar a esta afirmación.  

– Como dice Manuel, mi peluquero, ¡cómo están las cabezas!

Realmente, me da usted envidia… me gustaría ser guapo y tener peluquero.

El hombre empieza por hacerse daño a sí mismo

– El hombre, alejado de Dios, hace todo el daño posible al hombre, por codicia y por poder.

Efectivamente, pero es tan sumamente tonto que empieza por hacerse daño a sí mismo al alejarse de Dios. La codicia y el poder son indisolubles (a + b = c) entendiendo como el resultado de la ausencia de belleza. 

Y esto es así, porque a fin de cuentas la evolución se resume en la realización de una idea de bondad, en una filosofía estética que busque la libertad absoluta del espíritu pasando por el derrocamiento de la moral degenerada.

Para mí como lo fue para Kant, Dios es un Ser más allá de lo físico, es espiritual. Kant propone que la razón lógica debe estar subordinada a la ley moral para poderse superar aunque sea de forma imperfecta. Esa es nuestra obligación: la evolución. El hombre alejado de Dios es un ser nefando que hace posible la involución.

Los reyes ya no se cortan en su entrega al mal

– El diablo, satanás, nunca ha estado tan presente como ahora, incluso le rinde homenaje la monarquía con el premio princesa de Asturias a la satanista María Abramovich y con una abortista compulsiva, Gloria Steinem.

Existe una imagen reciente de la puerca sacerdotisa Marina Abramovich y Jacob Rothschild delante del cuadro de Sir Thomas Lawrence de 1797 titulado «Satanás convocando a sus legiones». Así la máxima representante artística del culto a Satanás es galardonada por un país de analfabetos e inconscientes que, eso sí, son muy demócratas. Lo único que espero es que el banquete sea un pastel, diseñado por la puerca, a base de vísceras inferiores y sesos de subsahariano rescatado por Cruz Roja.

Hoy he visto la inauguración de la feria ARCO donde los reyes de España se han retratado con el macho cabrío. Ya no se cortan en su entrega al mal, algo que hacen de forma pública y descarada. Eso debería ser motivo suficiente para que la ortopédica monarquía española dejara de tener un solo adepto. Tal y como escribí hace veinte años: «esta sociedad necesita de urgencia un giro a la decencia».

La irresponsabilidad de los padres con la timo vacuna de sus hijos que permiten y consiente es imperdonable