Redacción.
Tras la abrumadora y espléndida victoria de la abstención activa en Cataluña, rompiendo la falsa dicotomía romántica independencia-unionismo, se abre ya la expectativa con fuerza del cambio de un modelo político fracasado, insostenible y corrupto; en el horizonte apunta con fuerza la alternativa democrática nacional de la República Constitucional.