Ignacio Fernández Candela.
Enrique de Diego lo ha vuelto a hacer con el mismo ingenio nuclear que caracteriza el acerado verbo de su condición justiciera y equilibrada, a diestro y siniestro, golpeando desde siempre la corruptela de un mundo destinado a los tiempos apocalípticos actuales, vaticinados a través de sus artículos periodísticos dotados de extrema singularidad. Porque analizar las bajezas de la condición humana requiere la crítica y la pasión indignada, Enrique de Diego vuelve con este libro a compilar la crónica de la observación, desplegadas de nuevo la intuición y la ejecución periodística afiladas para clarificar este siglo XXI adverso, en el que el Mal ha redoblado fuerzas para echar el resto de la masiva desintegración moral de la Humanidad.
Y lo vuelve a hacer sin reservas, a ofensa directa contra los protagonistas de la iniquidad que han desollado, por intereses tabernarios, nuestra piel de toro con la simultánea capacidad globalista para despellejar el mundo entero. Lo incisivo en la letra que no perdona, la recopilación de los artículos en Rambla Libre son una muestra más de la certeza crítica sobre un orbe indefinido, manipulado hasta la execrable intención del genocidio y la descomposición que cada línea de este libro denuncia sin soslayar la provocación en lo expositivo, plena la crítica de racional sensatez como de explícita severidad contra los males que artificiosamente se han provocado en España y el terreno de juego mundial, donde el Bien lidia una holística batalla contra el Mal desatado sobre la Tierra.
Esta recopilación de artículos se triangula en la memez de una siniestra tan estulta como inicua, cuyos representantes se han convertido en modelos de aberración y vergüenza ajena enquistados en el poder; el nuevo pecado original que supone para esta izquierda totalitaria la responsabilidad universal del hombre blanco y heterosexual y la invasión de inmigrantes en Canarias, caballo de Troya introducido desde el ministerio del Interior buscando la disolución identitaria de España, siguiendo los siniestros planes de un desbocado NOM.
Un libro más que sumar a la ingente obra periodística, narrativa y ensayística de Enrique de Diego, baluarte intelectual en defensa de un indignado, necesariamente, sentido común ante un mundo inverosímil, sumiso y desquiciado tomado por unas hordas de Satanás tan estúpidas como malvadas. La crónica de este mundo engañado y dormido al que hay que despertar con aldabonazos de sólida realidad.
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