Editorial.
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump debe actuar ya para frenar el evidente golpe de Estado. El falseamiento electoral dejaría a nivel venezolano a la democracia más antigua del mundo y pondría en entredicho todos los resultados electorales de las demás, dado que George Soros ha presumido controlar a través de Dominion, Smarmatic e Indra 5.000 millones de votos en consultas electorales.
Las pruebas fehacientes del evidente pucherazo debe conllevar la puesta en prisión a la espera de un juicio justo de los responsables de este atentado a la credibilidad de la democracia. Lo que se ha dado en denominar el «Estado profundo», en el que participan tanto el Partido Demócrata como el Partido Republicano, han conspirado para quitar a Trump y subvertir la voluntad popular, con malas artes.
Se dan las condiciones de la Orden ejecutiva 13848 de 12-9-2018 y la 13840 de 20-9-2018 en aras a que la presidencia tome plenos poderes a fin de depurar responsabilidades frente a los enemigos interiores y exteriores. Lo que hay que hacer, lo que tiene que hacer Donald Trump, hay que hacerlo sin vacilar, sin miramientos. Los golpistas no pueden salirse con la suya.