Luis Bru.
Hemos conseguido en rigurosa exclusiva una entrevista con César Vidal, un hombre con autoridad y enorme talla moral para hablarnos de lo que está sucediendo en Libertad Digital SA. A tenor de los datos desvelados por Rambla Libre, César Vidal muestra «estupor y tristeza» y afirma rotundamente que «yo no pondría un céntimo en Libertad Digital». He aquí las respuestas de quien formó parte del Consejo de Administración y fue comunicador de referencia:
– Como antiguo accionista y exmiembro del Consejo de Administración, ¿Qué siente cuando ve las cuentas de 2018 de Libertad Digital SA presentadas ante el Registro Mercantil?
– Estupor y tristeza. Estupor porque me causan una pésima impresión y tristeza porque pienso en lo que pudo ser – o yo ingenuamente creí hace años que pudo ser – y resulta evidente que no ha sido ni por aproximación. Es imposible no sufrir una desazón profunda al ver esos datos.
– ¿Considera usted creíble que a Libertad Digital SA le deban “otras empresas del Grupo 3.481.495.12?
– La verdad es que me pregunto cómo es posible algo semejante. Quiero decir que si, por ejemplo, una empresa del grupo realizara series de TV y esas series las comprara LD para su canal de TV, hombre, no es que la operación tuviera muy buen aspecto, pero se le podría encontrar un cierto sentido. Ahora bien, en la situación del grupo desde hace años, sinceramente, no consigo imaginar cómo otras empresas del grupo le pueden deber a LD casi tres millones y medio de euros. No se me ocurre una sola causa razonable y legal. Quizá es que me falta imaginación.
– ¿Tienen entidad esas otras empresas –Libertad Digital TV, Libertad Digital Publicidad y Marketing, Cronos Multimedia- para pedirle prestado a Libertad Digital y aún más para devolverle?
– Teóricamente, pueden hacerlo, claro está, pero no consigo imaginar en qué se han podido utilizar esos préstamos y tengo profundas dudas de que puedan devolver un solo céntimo. La verdad es que se mire como se mire esa situación contable es muy extraña e inquietante. Insisto en que no consigo dar con ninguna justificación.
– El impuesto diferido de 3.388.403,56 representa otro “activo ficticio”. La Agencia Tributaria le debe esa cantidad por gastos deducibles que puede descontarse si obtiene beneficios en 10 años…Es un brindís al sol.
– Podría calificarse de ficción legal o de hipótesis optimista. Yo sinceramente no veo cómo en su actual estado y con pérdidas continuas puede llegar LD a tener beneficios. También es cierto que diez años es mucho tiempo. LD puede haber desaparecido, puede haber sido vendida… hasta podría tener lugar un prodigio y dar beneficios a la vuelta de años.
– ¿Qué puede subcontratar Libertad Digital SA por un montante de 5.804.424,75 teniendo una radio y un digital de tipo medio, al tiempo que mantiene fijos los costes de personal en 5,4 millones?
– Sinceramente, esa es otra de las partidas de la contabilidad de LD que no consigo comprender y crea que me he esforzado. LD puede pagar la luz, el agua, los cartuchos de impresora, el Spotify, el teléfono… pero por más vueltas que le doy no comprendo como se puede gastar casi seis millones de euros – ¡mil millones de pesetas! – en subcontratación. De verdad que no le puedo responder ni siquiera por vía de especulación porque no acierto a ver contestación posible. Casi igual de pasmado me dejan los costes de personal. Hace más de seis años, cuando yo me marché, los salarios de la gente de mi redacción eran bastante miserables a pesar de que yo me peleaba con la administración todos los meses para que los incrementaran un poco. Siempre, con cara de circunstancias, me decían que no era posible. O se han subido los salarios de los trabajadores de manera espectacular o algunos están cobrando unos ingresos estratosféricos porque, de lo contrario, no logro ver cómo salen esas cuentas. Si se trata de la segunda posibilidad, sinceramente, tal y como va la casa de pérdidas económicas, tampoco acierto a imaginarse cómo lo justifican sus gestores si es que se toman la molestia de intentarlo. Es muy lamentable, pero aquella casa – que durante años fue la mía – me lleva a pensar en las peores prácticas de algunos ayuntamientos y CCAA.
– Lo lógico es pensar que se subcontrata con Federico Jiménez Losantos y otros miembros de la cúpula…
– Esa es una circunstancia que ignoro. Desde luego, si fuera el caso la impresión que causaría sería pésima. Se podría llegar a pensar que alguien se está llevando el dinero por la puerta de atrás, pero la verdad es que carezco de elementos de juicio para formarme una opinión al respecto.
– Libertad Digital SA ha obtenido un crédito por 814.544,82 de entidad bancaria por el que Losantos ha pignorado sus acciones…¿Considera que los enjuagues contables de Javier Somalo se han hecho constantes?
– Ignoro quién lleva realmente la contabilidad de LD. Tampoco sé cómo se toman las decisiones al respecto. ¿FJL da órdenes y Somalo ejecuta? ¿Somalo actúa como quiere y FJL no se entera? Pues, sinceramente, no lo sé y crea que tampoco me importa. Sí me parece más fácil ver que los resultados distan mucho de ser deseables y que existen partidas que, por lo menos a mi, me causan un profundo estupor y cuya naturaleza no consigo desentrañar.
– ¿Puede pensarse en un saqueo de la empresa por Losantos y su pandilla?
– Pues me sucede como con el tema de la dirección. Sinceramente, no sé la respuesta. Afortunadamente, yo dejé de ser accionista hace años. Si lo fuera en estos momentos, estaría pidiendo explicaciones de la manera más enérgica porque las cifras son muy inquietantes.
– Existe una oferta por el 51% de las acciones de Libertad Digital SA con unas condiciones leoninas. ¿Sigue en pie?
– He leído algo al respecto. Personalmente, no puedo decir si existen negociaciones ahora mismo. Caso de existir, ignoro en qué estadio puedan encontrarse.
– ¿Le recomendaría a alguien invertir?
– Yo, personalmente, no pondría un céntimo en LD, entre otras razones, porque ya perdí bastante en épocas que fueron considerablemente mejores. Ahora bien, todo depende de lo que se vaya a invertir y lo que se quiera hace. Si alguien cree que es rentable, tiene el dinero y sabe cómo reflotar una empresa quizá pueda resultar de interés para esa persona. Si alguien desea cerrar LD, pues, también puede resultar interesante porque el momento parece especialmente adecuado. En el primer caso, no parece que pueda ser una tarea fácil y supongo que tendría que ir ligada indisolublemente a una verdadera purga de caballo que pasaría por la dirección, la gestión, las redacciones y los programas ya que es obvio que en casi todas esas áreas se pierde un dinero precioso y, a mi juicio, injustificado. Esas medidas, muy duras, pero indispensables, en mi opinión tampoco garantizarían el éxito, pero también es verdad que sin ellas no habría posibilidad de nada. En el segundo caso, sería más fácil. Compra, auditoria, responsabilidades a las que hubiera lugar con la ley y se baja el telón. En estos momentos, resultaría más que sencillo. En cualquiera de los dos casos, tendría lugar el fin de un proyecto que pudo ser y que no ha sido no por la acción de terceros sino por la conducta de sus propios gestores. Al final, los grandes perjudicados serían los trabajadores, en su mayoría, y los accionistas. Visto desde la distancia, recuerda lo peor de España, la verdad sea dicha.