Luis Bru.
Pocas veces un pedo ha sonado tan fuerte. Pocas veces ha dado tanto de que hablar una ventosidad. Carlos Alsina entrevistaba a Manuela Carmena cuando sonó un estreundoso y prolongado pedo. El Periódico dio la exclusiva de la flatulencia y Carlos Alsina dijo, en una rueda de prensa delirante, «han puesto este programa entre la espada y la pared». El tema ha llegado hasta arriba: se ha comentado en el Comité de Dirección de Atresmedia.
Risto Mejide no podía pasar la ocasión de hacer sangre o chirigita. Por de pronto, Arcadi Espada estaba preparado para intervenir, una vez que hubiera terminado Manuela Carmena, a través de una línea RDSI y pensaba que no estaba pinchado para entrar en el estudio y digamos que de esa forma se relajó. El olor no llegó, menos mal. En Todo es mentira se ensañaron con Arcadi Espada rememorando un programa Chester. Cuando intervino posteriormente intervino Juan Carlos Girauta, amigo de Arcadi, hizo referencia al contenido «maloliente» anterior del programa.
Arcadi Espada está de acualidad porque la Comisión de Arbitraje, Quejas y Deontología de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) considera que el escritor y columnista Arcadi Espada ha infringido la deontología periodística en los términos utilizados al referirse a los menores con síndrome de Down. Así se ha pronunciado la Comisión en una resolución tras la denuncia presentada por el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI). Según ha informado el CERMI en un comunicado, la Comisión señala que el uso de términos como “hijos tontos”, “peores”, “enfermos” o “víctimas de su condición” son “insultos directos” y “reprochables desde el punto de vista de la ética periodística”, por lo que “infringen” el Código Deontológico. Se censura especialmente el artículo publicado el 9 de mayo de 2013.
Es una indecencia que la FAPE tenga una Comisión Deontológica para ejercer la censura a una persona que no pertenece a la FAPE y, por tanto, no está obligado por su Código Deontológico. Es una forma de censura por quienes tendrían que defender en todo momento la libertad de expresión.
Dicho todo esto, hay que reprochar la hipocresía de que dan muestras los progres, como Risto Mejide incluído, que son partidarios de que los niños con síndrome de Down sean asesinados en el vientre materno, luego se erigen en escandalizados defensores a ultranza de los discapacitados. Los niños con ese síndrome están desapareciendo de la faz de España mediante prácticas eugenésicas abortivas.
Juan Carlos Girauta se mostró muy indignado con los partidos que introducen principios morales o «moralina» en su programa, con referencia Vox y no sólo a Vox. Bueno, él ha perdido las elecciones y el escaño, no está para dar lecciones a nadie, y resulta que los valores y los principios morales son importantes para 3,5 millones de españoles, que aguantan una campaña mediática sistemática.
Arcadi Espada hizo esos comentarios para defender el aborto según un maldito criterio eugenésico. Es la derecha pagana a la que pertenece Federico Jiménez Losantos y pertenecía Pedro J Ramírez, aprendiz de feminazi. En la que se inserta el conjunto de Ciudadanos, partido al que Arcadi ayudó a poner en marcha. Derecha partidaria de la unidad de España, pero todo lo demás es moralina. Lo que ha intentado Arcadi Espada es muy grave: ha querido estigmatizar a los padres que deciden no matar a sus hijos con síndrome de Down, como tontos e incluso inmorales, porque aquí los amorales tienden a hablar más de la cuenta de una moral a su conveniencia o que es inmoral, Y esto va también por Juan Carlos Girauta. El tonto es Arcadi Espada. Esos padres son dignos de todo elogio. Todos los casos que conozco son de una inteligencia destacable, y su relación con sus hijos es muy entrañable y tierna, pues lo que les falta en inteligencia les sobra en corazón.
Quizás el personaje de reservas inagotables de valor y de inteligencia preclara que fue padre de una hija con síndrome de Down, a la que siempre estuvo muy unido y cuya relación fue muy especial, fue el general Charles de Gaulle. Con eso está dicho todo. El padre de la Francia moderna, el autor de la V República, el fundador del gaullismo.
Todo esto ha venido a cuento de un pedo mediático de Arcadi Espada.