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Cuando llames a la cita previa de la lista del paro grita: ¡viva el Rey!

Redacción




Enrique de Diego.

En la historia de la estupidez y la adulación humanas el discurso, por llamarle de alguna manera, del mañaco Pablo Casado ante el Comité Ejecutivo de su partido en Barcelona merece cuanto menos una nota a pie de página. Una de las peores cosas que trae consigo el monarquismo es las tendencias cortesanas que desata en la naturaleza humana de los mediocres y Pablo Casado da muestras de que lo es mucho, empezando porque su curriculum, de la A a la Z, de sus licenciaturas a sus másters, es más falso que un Judas de plástico.

Pablo Casado ha llegado casi al mismo nivel de ditirirambo y el culto a la personalidad que el Pravda sobre Stalin: “Si usted tropieza con dificultades en su trabajo o de pronto duda de sus cualidades, piense en Stalin y encontrará la confianza que necesita. Si se siente cansado en momentos en que no debería ser el caso, piense en Stalin y su trabajo se desarrollará bien. Si está buscando una decisión acertada, piense en Stalin y la hallará”.

Cuando tenga usted que llamar a la cita previa para la cola del paro en el SEPE, según Pablo Casado, debe usted gritar “¡Viva el Rey!” Cuando vea que no hay división de poderes y que, a pesar de las declaraciones de la testaferro, Corinna, se archiva la corrupción de Juan Carlos, debe usted gritar “¡Viva el Rey!” Cuando le llega la factura de la luz con una nueva subida, grite usted “¡Viva el Rey!”, si le queda aliento. Cuando vea el desastre de las autonomías, grite “¡Viva el rey!” y haga el ridículo. Cuando observe que la deuda supera ampliamente al PIB, siga gritando “¡Viva el rey” y estará usted para que le lleven a un frenopático. Cuando vea que no se pueden pagar las pensiones…veremos si a Pablo Casado se le ocurre gritar “¡Viva el rey!”.

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Cuando haga usted una buena deposición grite…