Roberto Centeno. Catedrático de Economía.
Leo con indignación aunque no con asombro, ya que el sectarismo y la mendacidad del personaje son bien conocidos, el inaudito e indecente ajuste de cuentas que Miguel Ángel Aguilar ha perpetrado en Diario.es contra Antonio García Trevijano, el mas grande pensador político en español de todo el siglo XX, y el único político decente de la Transición, el único que no traicionó a España y a los españoles, robándoles la democracia e imponiéndoles una oligarquía de partidos sin separación de poderes, la colección del falsedades y calumnias llenas de odio de un personaje que lleva 40 años viviendo como un rajá de la traición a la democracia y del sectarismo izquierdista mas abyecto.
El tal Aguilar, pues calificarle de señor sería un engaño a los lectores y una falta absoluta a la verdad, se despacha con la colección de falsedades amañadas en su día por el Régimen del 78 que esta llevando a la ruina política, económica y social a esta gran nación y el PSOE muy en particular para desprestigiar al hombre que construyó lideró la única oposición democrática al franquismo, a través de la Junta Democrática y luego de la Platajunta, defendió la “ruptura democrática” frente al gran pacto oligárquico de la Transición entre franquistas liderados por Adolfo Suárez, un ignorante y un irresponsable total sin el menor sentido del Estado, y los dirigentes de la oposición Felipe González, Santiago Carrillo y otros, los cuales conseguirían encarcelarle (algo que nunca hizo Franco) y lo que es peor calumniarle y condenarle al ostracismo.
Y es precisamente el Himalaya de mentiras y calumnias construida por los traidores del 78 sobre su falso enriquecimiento durante el proceso de independencia de Guinea Ecuatorial, que el PSOE difundió en los medios informativos a finales de 1976 facilitados por el grupo político guineano ANRD, que acabaría reconociendo que el “dossier” anti-Trevijano elaborado a petición del PSOE “estaba plagado de datos falsos y falsificados”, añadiendo que “Trevijano pudo haber hipotecado Guinea Ecuatorial, si le hubiera salido esa vena, pero con el no hubo espacio para la corrupción”. Todos los historiadores serios explican que la intervención de Trevijano en Guinea fue para “frustrar el proceso independentista organizado por el Gobierno de Franco”.
Francisco Macías principal opositor al candidato apoyado por el franquismo Bonifacio Ondó, asesorado por Trevijano logró aglutinar a todas las fuerzas dispersas, y derrotar ampliamente a Ondó en las elecciones. Con Macías de Presidente, Trevijano continuó asesorándole en cuestiones técnicas. Mas tarde un golpe de Estado con apoyo franquista de su ministro de exteriores Atanasio Ndongo fue derrotado y como es habitual los responsables fusilados como es habitual en países todo el tercer mundo, igual que es habitual el procesamiento y encarcelamiento de los golpistas en el mundo occidental, excepto en España donde se les deja conservar el poder y se les financia con dinero público.
En mayo de 1971 Macías derogó parte del articulado de la Constitución para afianzar su poder personal y establecer una dictadura de partido único mediante el Decreto, momento en el que Trevijano que había redactado esa Constitución, rompió sus relaciones con él. La acusaciones de enriquecimiento de todo tipo que vierte Aguilar son una falta absoluta de honradez y una más de sus habituales exhibiciones de sectarismo e impudicia y las acusaciones de que aquellos que participamos de la ideas democráticas de Trevijano lo hicimos para lucrarnos del dinero de Guinea, las hemos puesto en manos de un prestigioso bufete penalista para ver si son susceptibles de presentación de una querella penal.
Cuenta el conocido y prestigioso periodista Pablo Sebastián, Presidente como Trevijano “entusiasmó a la Comisión Europea en su primer contacto con la oposición a Franco, en una reunión celebrada en Estrasburgo a mediados de los años 70 que organizó Claude Cheysson, comisario europeo y ex ministro de Francois Mitterand quien tras el encuentro de Estrasburgo se declaró impresionado por la lucidez y los conocimientos del político español”. Trevijano era el gran obstáculo para el Régimen del 78, “hoy en nuestro país solo triunfan los corruptos y los traidores, todos han traicionado” diría, “empezando por el Rey Juan Carlos, que “ha traicionado a su padre, ha traicionado a Franco y ha traicionado a los españoles apoyando a la oligarquía y robando la democracia”.
Luchador incansable por la democracia y la verdad hasta su último aliento, la muerte le ha sorprendido preparando una querella penal contra Rajoy por “haber impulsado la corrupción sistémica de la que se ha visto favorecido tanto política como personalmente”, y contra él y la Vicepresidenta Saenz de Santamaría por “gravísimo incumplimiento de sus obligaciones más esenciales de cumplir y hacer cumplir la Ley en Cataluña, y permitido el aplastamiento de los derechos humanos mas elementales de los catalanes no separatistas por parte de una organización criminal, y por haber permitido la utilización de edificios públicos en la preparación de un golpe de Estado y además haberlo financiado con dinero público”, algo que en todo Estado de Derecho es un acto claro de alta traición. Esta es la razón de las patrañas y las mentiras de Aguilar para tratar, en vano, de desprestigiar al único político honrado que ha habido en España en los últimos 40 años.