Enrique de Diego.
A través del digital de El Mundo -ya diré algo sobre el periodismo basura que practica- has amenazado, Fran Hervías, alias «Señor Lobo«, secretario de organización de Ciudadanos, con llevar a los tribunales a todos los que pongan en duda la limpieza de las primarias de Ciudadanos. Pues vas a tener que gastarte el 30% de los ingresos de las asignaciones de todos los grupos -lo que indica que os financiáis de las instituciones, y eso está muy feo- en despachos de abogados, dignos de ese nombre, porque a la redacción de Rambla Libre no dejan de llegar testimonios de exmilitantes y aún militantes transparentes que ponen en duda el invento telemático.
Chirigota en las redes sociales
En las redes sociales, ya has sido ocasión de chirigota. Por ejemplo, Luis García-Borruel, exportavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Badajoz y concejal no adscrito, ha escrito: «Albert amenaza y yo te acuso directamente. Espero tu denuncia. Hervías te acuso de permitir una votación de la agrupación de Badajoz sabiendo que había afiliaciones masivas. Llévame al Juzgado».
Plataforma de Garantías Ciudadanas, donde han recalado cientos o quizás miles de expulsados de Ciudadanos, han escrito: «Estimados liberales de @Ciudadanos, decidle a @FranHervias que no hay eggs» (huevos, supongo).
BloqueadosxRivera: «Y el último Congreso también se manipuló. Cambiaron los títulos de las candidaturas de los compromisarios poniendo primero a quienes querían«.
Mari Carmen Prieto, exdiputada autonómica andaluza de Ciudadanos y ahora no inscrita: «Es una broma. 1) Se permitió el voto delegado en las primarias para municipales de Málaga, prohibido por Estatutos. 2) Con idea de que los oficialistas te asegurarán los puestos. Allá que fueron a cierto pueblo a recabar los votos previamente pactados«.
Como ves, ya no te toman en serio. No me extraña que hayas «caído en desgracia«, como informa Miguel Sempere.
No me ha gustado que señales a Isidro Gordillo
Mira, Fran, tipo duro, no te conozco, no tengo el gusto. Nunca en mis más de cuarenta años de vida profesional he tenido la más mínima intención de injuriar a nadie. ¡Ni se me pasa por la cabeza! Y menos que a nadie a ti. Incluso podría sentir simpatía, y un punto de compasión, porque eres, como yo, hijo del Cuerpo de la Guardia Civil. Y tú has tenido una infancia triste, acosado por ello en ámbitos separatistas catalanes, aunque eso no te justificaría para infringir sufrimiento a nadie.
No me ha gustado, la verdad, que señales y amenaces directamente desde esa gacetilla digital de El Mundo a Isidro Gordillo, exmilitante de Ciudadanos y colaborador de Rambla Libre, por el que siento sincero aprecio. Tras más de dos mil expulsiones, con un Comité de Garantías que ni es Comité -nunca está completo- ni ofrece garantía ninguna, con 145 cargos electos en grupos de no adscritos, te has ganado alguna fama de abusón y tú has presumido en ese periódico inmundo de que Juan Carlos Girauta, un hombre sin duda de principios, te bautizó «Señor Lobo«, por un personaje de Tarantino, y que tú estás encantado y has presumido de ello como un pardillo. He de reconocer que nunca he visto una película de Tarantino ni entra entre mis intenciones futuras visionar nada de ese detestable cine gore y sádico, pero me he informado de que es un criminal psicópata, frío, que se encarga de limpiar la escena del crimen y hacer desaparecer los cadáveres. Que te identifiques con un psicópata criminal es patético, perdóname, machote. Y con esas referencias, ¿a qué tribunal vas a ir tú hablando de tu prestigio, Señor Lobo?
¿Te suena un tal Eugenio Rodríguez?
La cuestión es que tus primarias -que tras la 4 Asamblea de la conversión de la socialdemocracia al liberalismo, como si eso fuera cualquier cosa, ¡qué frivolidad intelectual!, son de corta y pega- las pone en duda media España, así que vas a arruinar a Ciudadanos con minutas de abogados y vas a colapsar los Juzgados de lo Penal, que están para cosas más serias. Todas y cada de las primarias han sido cuestionadas en su limpieza. Ha habido impugnaciones por doquier. Y hay un tal Eugenio Rodríguez -¿te suena? ¡claro que te suena! lo nombraste tú delegado territorial de Sevilla- al que le han pillado con el carrito del helado, presumiendo de que va a manipular las primarias de Sevilla -que tan de cerca te tocan, Fran– para que no entre «ningún becerro», y salga como sea Virginia Millán Salmerón, que seguro que te suena porque es tu esposa. ¿A quién vas a llevar tú al Juzgado, Fran, machote, si estás para que te lleven a ti?
Siempre has acertado el 100% de las primarias
Mira, Fran, «Señor Lobo», Girauta dixit, hay un hecho contrastable y objetivo: en el 100% de las primarias de Ciudadanos, con tu sistema telemático de la señorita Pepis, ganó el candidato y la lista que tú querías, la oficial. Nunca, nunca, ha salido nadie crítico. Nadie que tú no quisieras. Por eso Girauta te llama «Señor Lobo» y a ti se te ríen las carnes de orgullo morboso. Eso canta, ¿no te parece?
Los abundantes y casi abrumadores testimonios que nos están llegando sin buscarlos son de gente que ha participado de buena fe en tus primarias, de gente que dice «me creí todo el mensaje y a ese chico de Rivera con cara limpia y nueva» y luego «era todo mentira«, y otro: «dicen una cosa y hacen la contraria«, y otro más: «es la vieja política pero mucho peor porque te venden un discurso falso«. No sigo, porque nos está tocando abrir carpetas por regiones, por provincias y por distritos, que en Madrid has organizado 21 y tú sabes para qué.
Vamos con lo de tu sistema telemático, ese que siempre te da la razón, Fran. Dijisteis que los resultados los certificaba la Fábrica de Moneda y Timbre y se fue a hablar con ellos el abogado Alberto Ganga con militantes de Madrid y les dijeron que eso era mentira, así que te toca llevar a los tribunales a la Fábrica de Moneda y Timbre.
De cómo se puede manipular, sencillo, tu sistema telemático, Fran
Mira tu sistema telemático funciona de la siguiente manera. Va el militante y vota y tiene un número de votación. Vale. El voto no está relacionado con su correo electrónico. Todo lo tenéis relacionado con el correo electrónico, menos eso. Raro, raro. Y luego sacáis los resultados con los dichosos números de votación. Los sacáis siempre muy tarde. Tardáis habitualmente no menos de siete u ocho horas. Un sistema telemático más lento que el caballo del malo.
Si yo fuera mal pensado, podría elucubrar que quien tenga el censo puede comprobar quienes han votado y quienes no, y puesto que con el censo se tienen los DNI se puede coger y votar por los que no han votado. Es un método bien sencillo que no deja huella, como si lo hiciera el Señor Lobo de Tarantino. No deja huella porque sólo se hace público un número y como no hay conexión con el correo electrónico, ya me dirás, Fran, cómo se entera el abstencionista de turno de que han votado por él. Sencillo e infalible, ¿verdad, Fran?
Y no deja de ser sospechoso, que por todos, todos, los testimonios que nos llegan en torrentera nunca has entregado el censo a nadie que acudiera a las primarias en buena lid sin tu apoyo. El censo sólo lo ha tenido el candidato oficialista, el tuyo. No les distes, por ejemplo, el censo de militantes ni a Jaime Barrera, ni a Lorenzo de Arístides, burlados competidores de tu esposa Virginia Millán Salmerón en las primarias de Sevilla.
Hay un método que hubiera evitado suspicacias: poner una urna. Pero, claro, tú estás por la modernidad.
Me dicen fuentes directas y solventes, que en Castilla-La Mancha bloquearon la web de votación a propósito, y durante el tiempo que estuvo sin poderse acceder desde fuera, también se depositaron telemáticamente muchos votos. Milagros de la informática.
Bueno, Fran, llevar a alguien a los Juzgados no es ni llevar razón, ni condenarlo. Estás haciendo lo peor que se puede hacer en política: el más soberano ridículo. Es posible que se te subiera el poder a la cabeza -tras estar de recepcionista de hotel a secretario de organización de Ciudadanos- y te haya pasado aquello que tan lúcidamente diagnosticó Lord Acton, que te hayas puesto a abusar de él. Me temo que has perdido el sentido de la realidad y no eres consciente de que se te ha acabado la racha y que llevas pésimas cartas en la mano. Incluso no es difícil vaticinar que te vas a cargar a Ciudadanos. Ni tampoco que a lo mejor o a lo peor te encuentras tú con unas cuantas querellas. Aquello de salir trasquilado.