Miguel Sempere.
Las irregularidades y sospechas no hacen más que aumentar en la Empresa Municipal del Suelo de Leganés (EMSULE), presidida por el alcalde Santiago Llorente y cuya esposa es la directora financiera y jefa de Administración. A la confesión del gerente reconociendo estar siendo investigado por la Guardia Civil al mostrarle un documento de la Benemérita el propio alcalde, hechos ocultados y silenciados por el primer edil y que el partido vecinal ULEG ha puesto en conocimiento del Instituto Armado, se suma el que desde el 1 de enero de 2017 el gerente actúa sin los poderes legalizados, al haber caducado los mismos según refleja acta del Consejo de Administración de la empresa pública.
ULEG alerta del cúmulo de irregularidades, algunas de ellas de relevancia criminal, que se están produciendo en el universo opaco y clandestino en el que se mueve toda la información relacionada con la Empresa Municipal del Suelo de Leganés (EMSULE). Hechos de enorme gravedad que están siendo deliberadamente ocultados por parte del alcalde de Leganés. Un alcalde que se ha visto forzado a confesar que recibió una “solicitud” de la Guardia Civil, sin explicar en qué consiste la misma ni la contestación dada por él al Instituto Armado. Para añadir más turbiedad al ya denominado como “caso EMSULE” se suma el descubrimiento de que desde el 1 de enero de 2017 el gerente opera sin poderes legalizados, puesto que según reza en el acta del Consejo de Administración de la empresa pública de fecha 14 de junio de 2016, tal habilitación se otorga con la salvedad de que sea hasta el 31 de diciembre de 2016. ¿Qué se está haciendo? ¿Por qué? ¿Qué se está tapando?
El partido local está alarmado ante la actitud del alcalde, que podría también estar cometiendo alguna irregularidad penal, quien además es presidente del Consejo de Administración de EMSULE y de la Junta General de Accionistas. Accionista único conformado por el ayuntamiento integrado por sus 27 ediles. Unos ediles, accionistas y miembros del Consejo de Administración que siguen sin ser ni convocados ni informados en ningún momento, al menos los del principal partido de la Oposición que es ULEG, grupo político que va a solicitar una Junta General Extraordinaria para este fin y que lleva desde el principio de la legislatura denunciando los tejemanejes de esta empresa y las sombras y sospechas de componendas matrimoniadas entre PP y PSOE con la colaboración de un edil tránsfuga expulsado de Cs. Empresa convertida desde hace años en un opaco y turbio cortijo donde la esposa del alcalde es desde tiempo inmemorial la directora financiera y jefa de administración. “Si la semana pasada dijimos que todo apunta a que la Guardia Civil ha llegado a EMSULE para quedarse. Hoy creemos que la Guardia Civil va a tener en Leganés una larga estancia”, explica ULEG.