
Miguel Sempere
ULEG es la más exitosa experiencia de municipalismo de España. Tiene, por tanto, toda la lógica que Carlos Delgado haya sido reelegido como presidente. Presume de equipo cohesionado y preparado, de trabajo, y es inmisericorde con el equipo de Gobierno, cuya gestión viene descrita en términos de desastre, sin modelo de ciudad, como un cortijo, y en el que el déficit ético es tan acusado que citar la ética es tomado por un insulto, también para un PP en sesteo.
- Usted ha sido reelegido presidente de ULEG en unas primarias en las que no se ha presentado nadie. ¿Tan controlado tiene usted el partido? ¿No hubiera sido mejor que se presentara alguien para seguir el trámite?
En ULEG puede presentarse cualquier afiliado, además sin necesidad de avales. En las primarias de 2013 sí hubo otro compañero que se presentó y el proceso transcurrió igualmente con la máxima normalidad. En nuestro partido las primarias no son un espectáculo, una coartada para justificarse o una operación de márketing, forman parte del adn de nuestra formación y con esa naturalidad de saber que quien controla ULEG es su centenar de afiliados se afrontan. Creo que los compañeros, a los que agradezco enormemente esta demostración de confianza, han aplicado esa sabia máxima de “lo que funciona no se toca” y si he liderado un proyecto que era una semilla hace 14 años y hoy es toda una realidad exitosa que crece en cada cita electoral y que mira a los ojos al PPSOE, a ese bipartidismo invencible cuando nacimos e incluso los supera en votos, algo habré tenido que ver.
- ¿Se siente usted con ánimos para la nueva etapa?
Más incluso que cuando comenzamos allá por 2003. Ahora además cuento con más experiencia, rodeado de un equipo preparado y unido. ULEG ha alcanzado una velocidad de crucero y ha consolidado un equipo de trabajo que llegará en su mejor momento para las próximas elecciones municipales de 2019. El “Efecto ULEG” está irradiando más que nunca.
- ¿Cuáles son sus objetivos para ULEG?
Cambiar la forma de hacer política. Ser protagonistas en el cambio radical, entendido como de raíz, que se ha de producir en las instituciones. Aspiramos en 2019 a tener una mayoría lo suficientemente amplia para no tener que depender de los caprichos y las hipotecas que siempre aplican otros partidos, en especial el PPSOE, donde sólo pretenden o el silencio sobre su nefasta gestión o convertir el ayuntamiento en una agencia de colocación de empleo y red clientelar para amigos y afines. Ha llegado la hora de tener en Leganés (y que sea paradigma en el resto de España) un gobierno H.E.T.E (Honrado, Eficaz, Transparente y Ejemplar), frente a los habituales gobiernos E.T.E, es decir extraterrestres, por lo lejanos que están en atender a la verdaderas necesidades de los vecinos, que son nuestros únicos jefes.
- ¿Cuáles son las necesidades fundamentales de Leganés a las que no se está haciendo frente?
Una ciudad de 190.000 habitantes que tiene 14.000 desempleados tiene un problema ineludible. Detrás de las cifras hay personas, familias, proyectos vitales que se ven frustrados por esa precariedad. Es cierto que no es un problema local, sino nacional, pero se puede hacer mucho más desde un ayuntamiento en políticas sociales. Además, este ayuntamiento tiene que liberarse del cortijismo al que le ha sometido los cerca de 40 años casi ininterrumpidos (hubo un breve y negro paréntesis del PP durante 4 años) de gobiernos del PSOE. Hay enormes déficit en transparencia, en participación democrática y una carencia absoluta de modelo de ciudad. El PSOE quiere el poder a toda costa, pero cuando lo tiene no sabe qué hacer con él más allá de hacer de la institución de un chiringuito para allegados y afines. Cuando ves el estado de la piscina Solagua, del Pabellón Manuel Cadenas, de la Biblioteca Central observas con toda su crudeza el daño que hace que lo público esté en manos de incompetentes.
- Si me lo permite, quizás por los resultados electorales, el equipo de Gobierno, en sus alianzas, da una imagen pobre, de poca elevación de miras y deficiente en el terreno ético.
Es un gobierno lastrado por los peajes internos, donde la guerra civil atávica en el socialismo local sólo se sofoca con cargos y prebendas a todas las “familias”. Es un gobierno dependiente de tránsfugas, como el edil expulsado de Cs, de un florero que es en lo que se ha convertido un edil de la IUCM expulsada de IU y de un PP que ha renunciado a ser oposición y alternativa como consecuencia de las hipotecas que su portavoz dejó en Urbanismo y en la Empresa Municipaldel Suelo (EMSULE), lo que sumado a sus “prioridades” personales han convertido el ayuntamiento de Leganés en una institución donde la ética no sólo brilla por su ausencia, sino que cualquier apelación a la misma es entendida como un insulto para estos desgobernantes. El episodio de la Tarjeta VisaÑam (la “black” de las comilonas del alcalde a cargo del erario que se vio obligado a devolver, aunque no devolvió el dinero) es todo un símbolo de lo que decimos.
- El municipalismo es una fuerza muy intensa, pero al tiempo poco articulado. Leganés es una excepción exitosa, y en momentos de mucho cambio político, ¿cuál es la fórmula secreta?
Es un tópico, pero es verdad: trabajo. Esto unido a contar con el apoyo de gente leal, honrada, talentosa y eficaz que cree en la política como servicio y no como instrumento para servirse hace que como la lluvia fina nuestra labor cale en los vecinos. Ellos saben que estamos ahí cada día con ellos y no 15 días cada cuatro años. Nuestra labor para eliminar la tasa de basura, el apoyo a los preferentistas, a los afectados por la estafa de Funnydent, de las cláusulas suelo…, es una demostración con hechos concretos de que en ULEG se puede confiar. Y la confianza así como un mensaje claro y coherente es la materia prima por la que se consiguen las cosas en el largo plazo.
- ¿Ha seguido la Asamblea Nacional de Ciudadanos? ¿Alguna valoración del autor de Albert Rivera es un lagarto de V?
Es el proceso típico de bunkerización ya vivido en Upyd. No hay militancia real. Es un espejismo de partido que da la espalda ala realidad. Lasacralización y el culto a la personalidad ha llegado al paroxismo, donde se expulsa el talento y se destierra la meritocracia en favor de la adulación personal al líder y de la exacerbada ambición arribista. A Ciudadanos lo sostienen las elites financieras para proteger sus intereses de clase y mientras sea útil para ese fin estarán amparados por el establishment. Si ciudadanos es “liberal”, como ahora quieren autoetiquetarse, yo soy con mi escaso 1,70m Kareem Abdul Jabbar. Lo de regeneración no merece ni comentario jocoso por mi parte. Una pena, porque España demanda una tercera vía para esa tercera España, parafraseando a Sieyes. Esa España de la gente honrada, trabajadora, con principios, que cree en la libertad y la igualdad de oportunidades. Ese ULEG en lo local que pueda trascender a lo nacional como lo estamos trabajando desde la organización política Tercera Vía que aglutina a diversos partidos independientes. Porque Cs es un trampantojo, un infecto sucedáneo que prostituye planteamientos bienintencionados a mayor gloria de Rivera y al mejor postor para sus caprichos personales y los de su corte de palmeros.