
Virginia Montes
El domingo, 2 de octubre, Hungría inicia la rebelión de las naciones contra Bruselas y el plan Soros de islamización de Europa. Los húngaros responderán con un Sí o un No a la pregunta: «¿Quiere que la Unión Europea tenga derecho a determinar una cuota obligatoria de ciudadanos no húngaros en Hungría sin el consentimiento del Parlamento?». Una clara reivindicación de la soberanía nacional.
El Gobierno de Viktor Orbán espera un respaldo a su oposición categórica a que refugiados entren el país. De hecho, Hungría ha elevado vallas en sus fronteras y ha endurecido la legislación de inmigración con penas de hasta cinco años de cárcel por el cruce ilegal de las fronteras, así como as llamadas devoluciones en caliente.