La mezquindad de Juanma Castaño no podía ser eterna. El último EGM registra un desplome del programa El Partidazo, que dirige el comunicador asturiano. En una COPE entregada al globalismo, Castaño representa bien el modelo que promueve la emisora de la Conferencia Episcopal Española. Con dos hijos, Castaño se separó e inicio una relación con una de las redactoras de su emisora, Helena Condis. La catalana salía antes con otro periodista, al que cambió por su actual jefe, sin importarle la diferencia de edad. La carrera de Condis desde que iniciase su relación con Castaño es meteórica. La relación se confirmó cuando Castaño mostró sin querer una foto de Condis en su móvil durante una intervención con Ibai Llanos. En sus viajes de pareja, Condis levanta niños en África como si fuesen juguetes. Castaño comentó la preocupación de su barragana por no tener suficiente agua para lavarse el pelo.