
Luis Bru
Una buena, magnífica noticia: los diarios de papel se hunden. Lástima que no lo hagan más deprisa y de manera más acusada. Son el instrumento de la casta para la defensa de sus privilegios, se dedican a la desinformación adormecedora. No sólo es cuestión del papel y de que sean unos dinosaurios, es que deben reproducirse lo menos posible en el mundo digital: son culpables de desarmar intelectualmente a la sociedad, son basura mediática.
En la OJD de noviembre, los resultados son catastróficos. La venta de diarios de El País bajó el 20% respecto a noviembre del año pasado: de 131.293 a 105.092. La venta de El Mundo bajó el 19,2%: de 81.477 a 65.799. Abc bajó el 16%: de 84.100 a 60.000. Y La Razón, que bajó el 9%, solo vendió 39.354 ejemplares de media diaria.