Josep Sansano.
Durante un año, un depredador sexual, inmigrante marroquí de 24 años, ha agredido a siete mujeres españolas, seis de ellas menores, en Alicante capital. Las primeras denuncias tuvieron lugar el 30 de mayo del año pasado, cuando se presentaron dos denuncias por agresión sexual, delitos cometidos el mismo día y con escasas horas de diferencia en un barrio de Alicante. El modus operandi ha sido siempre el mismo: el agresor seguía a las víctimas hasta el portal de su vivienda donde se introducía y las agredía brutalmente.
El miércoles 13 de junio de este año los agentes localizaron en Alicante el vehículo utilizado por el agresor, de 24 años y nacionalidad marroquí, y tras un seguimiento discreto, lo interceptaron y detuvieron en Elche como presunto autor de siete delitos contra la libertad sexual. En un registro domiciliario, los investigadores encontraron ropa y complementos utilizados por el arrestado durante la comisión de los delitos investigados.
Inmigrantes magrebíes están extendiendo el terror sexual. A finales de marzo de este año, diez argelinos fueron detenidos tras violar a tres menores en desamparo. Una de ellas, de 14 años, fue retenida o secuestrada durante 24 horas siendo violada repetidamente por el grupo. Hay connotaciones de mucha mayor inhumanidad. Se trataba de menores. Y de menores especialmente vulnerables que han sido tratadas con violencia como meros objetos.
Nuevo caso de presunta violación en grupo por parte de argelinos en grupo. La Policía ha detenido a tres hombres, de los cuales dos han sido puestos en libertad provisional, tras negar los hechos, y uno ha ingresado en prisión. Éste fue detenido cuando trataba de huir a Argelia.
Estamos ante una auténtica plaga. A mediados de abril, una sudamericana de 19 años denunció haber sido agredida sexualmente en grupo. Coincidió con un argelino de 34 años en una discoteca de la zona del Puerto de Alicante, y decidieron ir a la casa de éste, en las cercanías de la Explanada, aunque la joven advirtió que nada de sexo. El juzgado de guardia de Elche envió a prisión a uno de los denunciados, que fue sorprendido en el aeropuerto cuando intentaba huir a Argelia.
Según la joven, cuando llegaron a la vivienda, de las habitaciones salieron tres jóvenes, que empezaron a agredirla sexualmente. Finalmente, el hombre con el que había coincidido en la discoteca la llevó hasta la calle, ella buscó un local comercial abierto y llamó a la Policía. Ésta detuvo en la casa a dos hermanos, que han afirmado que criticaron al que había llevado a la chica, por haberlo hecho. Es el que la llevó a la casa el que ha ingresado en prisión, tras ser detenido cuando iba a embarcar en un avión hacia Argelia.
De esta situación, que ha generado una elevada alarma social, no se han hecho eco ninguno las televisiones, nadie ha ofrecido noticia ni ningún reportaje, ni, por supuesto, ha habido la mínima condena o muestra de repulsa por parte de ninguna asociación feminista ni de ningún partido político. Una auténtica vergüenza.