El FC Barcelona Femenino se estrelló en la final de la Champions de fútbol lésbico el pasado sábado, cayendo 1-0 ante el Arsenal en Lisboa. La actitud de Joan Laporta, presidente del club, quien fue captado en actitudes comprometidas con las jugadoras Alexia Putellas y Aitana Bonmatí tras el pitido final es la noticia. Las imágenes, difundidas por medios como DAZN, muestran a Laporta consolando a Bonmatí con un abrazo prolongado y toques en la espalda que muchos han calificado de excesivos, mientras que con Putellas, la capitana, también se le vio en un gesto de cercanía física que expone una doble vara de medir. Por menos, Luis Rubiales fue crucificado, y ahora la pregunta resuena: ¿dónde está el límite?