🚨I 🇺🇸 #ÚLTIMAHORA | Ex-Swiftie QUEMA todos sus productos de Taylor Swift después de que la cantante apoyara a Kamala Harris. 🔥
“No quiero ser una mujer gata sin hijos como ella”. 😼 pic.twitter.com/rDiK9I3JuD
— 🔰Guardianes Patrióticos (@Patrioticos_RD) September 12, 2024
Enrique de Diego.
Taylor Swift eres un mar de absolutas contradicciones. Cantas menos que un grillo y en las letras de tus canciones dices que todas tus decisiones son erróneas, tanto que te deprimen mucho y te emborrachas, y luego vas diciendo a la gente a quien tiene que votar y les dices que depositen la papeleta al inmenso error, al horror Quemala Harris. que no ha celebrado ni primarias. Para deprimirte mucho más y cogerte un pedo monumental. Porque va a ganar Donald Trump, a tu pesar, y las swiftie van a hacer lo que la del vídeo y te vas a quedar sola con Óscar Puente. Tu música es, al fin y al cabo, como un microondas para el cerebro.
Repito, porque no salgo de mi asombro: todas tus decisiones son erróeas lo que te lleva a la depresión y resulta que atreves a decir a los demás tus decisiones. Pero, bueno, estás más vista que el tebeo y eres previsible. Estás al servicio de BlackRock, eres una creación suya, y al servicio de Pfizer, que es de BlackRock, y el tarugo de tu noviete es conocido como Mr Pfizer. Papá vendió Merry Linch a tito Larry Fint.
Sin venir a cuento sales con tu gato para decir que es mejor no tener hijos porque la vida te la llena un lindo gattoo, siempre que no vayas con él a Springfield, Ohio, y lo cogan por banda una pandilla de haitianos y den buena cuenta de él. Desde luego, en tu mansión, que tienes al lado del mar, en la misma orilla, porque estás bien segura de que el calentamiento gúeval es un cuento, es una grosera mentira, desde luego no debe haber un solo ratón.
Vete por donde amargan los pepinos y quien te haga caso también. Vaya pedo inmenso que vas a coger mujer degradada, ejemplificas toda la degradación contra la que luchamos. Y va a ganar Trump, no le habéis matado, como prentendíais.
Taylor Swift, dueña de una mansión «amenazada» por el cambio climático