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Carta a Juan Manuel Moreno Bonilla, pilltrafilla: Tú eres el culpable de la sequía

Redacción




Enrique de Diego.

Todo empezó cuando se desató el ataque, inmisericorde y cruel, de la mentira de la plandemia a la que tú, Juan Manuel Moreno Bonilla, piltrafilla, mediocre entre los mediocres, y tu partido de mierda, os prestasteis con indisimulado entusiasmo, como lacayos pérfidos y perversos que sois, matasteis a nuestros mayores, nos confinasteis como si estuviéramos en un campo de concentración nazi, y le ofrecisteis al pueblo español, tú al andaluz, morir o enfermar timo vacunándose, con una inyección que contenía un veneno de muerte, y del que tú te lucrabas, sanguijuela, con tu esposa, a sueldo de la farmafia, de las farmacéuticas, Tenías un consejero de sanidad zampabollos, Jesús Aguirre, que no sabía decir más que «vacunar, vacunar, vacunar», que significaba en esta transvaloración terrible, matar, matar, matar.

Porque esto de la sequía, de la que tú eres culpable.  muy culpable, es la continuación del ataque para quitar el agua a los andaluces, a los aceituneros altivos de Jaén, que cató el gran Miguel Hernández, a los de fresa de Huelva, a los emprendedores de Almería y sitiar a las ciudades por sed, como en los asedios medievales.

Anuncias, con esa sonrisa bobalicona de telegenia, que habrá recortes de agua en junio, y anuncias para paliar la sequía, de la que tú eres culpable, muy culpable, inversiones millonarias para llevar agua a Andalucía. Canalla, so canalla, si mientras tanto has vertido agua al mar de los embalses, has destruido presas y pantanos y has estado fumigando con aerosoles para destruir nubes y provocar una atroz sequía.

Mira lo que te digo, sanguijuela, y pueden apuntarse el agravio Carlos Mazón, en la Comunidad Valenciana, y Fernando López Miras, en la muy sedienta Murcia, con las cosas de comer no se juega, y menos con el agua. La ira del pueblo cuando se vea abocado a la sed acuciante se va a volver contra ti, piltrafilla, y contra Fernando López Miras, y Carlos Mazón, los del «agua para todos». Y entonces estaréis perdidos. Esta es una guerra cruel y despiadada por la supervivencia, y a un lado estáis los globalistas y la casta y al otro el pueblo y os vamos a ganar, os vamos a pasar por encima.