Enrique de Diego.
En la obsesión vacunazi, las «trepamediocres» autoridades sanitarias se disponen a cazar a los niños en las guarderías, lugar totalmente inadecuado para cualquier práctica médica. La Catedrática María José Martínez Albarracín pide los padres que «no cedan a la propaganda y al miedo», que defiendan a sus hijos, y que no los timo vacunen:
– Se ha presentado una denuncia de tres padres ante la Fiscalía General del Estado contra Sanidad por el asesinato de tres adolescentes tras la timo vacuna covid. ¿No es un aviso imperioso para no timo vacunar a los niños?
R.- Ha habido bastante más muertes de jóvenes y niños después de la inoculación de estas “vacunas”, que son en realidad terapias génicas. Sería bueno que todos los padres que han sufrido esa horrorosa pérdida se unieran para denunciar, porque los estamentos y autoridades sanitarias están demostrando que no están al servicio de la población sino de las empresas farmacéuticas pagadoras. Y niegan cualquier dato sin investigación: ¡Son negacionistas!
– ¿Por qué en las guarderías? ¿Es más fácil matar a los niños?
R.- La aplicación de vacunas u otras intervenciones sanitarias en los colegios debería estar absolutamente prohibida porque no son lugares que cuenten ni con la asepsia, ni con los medios, ni con el personal adecuado para atender una posible emergencia en caso de que se produzca, y estos accidentes es más probable que ocurran en lugares inadecuados.
Si se actúa de esta manera es con vistas a la captación de más niños, no a su seguridad, ya que en guarderías y colegios es más fácil pillarlos a todos.
– Los padres, ¿qué pueden hacer? ¿qué deben hacer?
R.- No deben ceder a la propaganda ni al miedo. Hay ya suficientes estudios que demuestran que la salud de los niños no vacunados o poco y tardíamente vacunados, es mucho mejor que la de los muy vacunados. Hay que tener en cuenta que el sistema inmunológico no está medianamente maduro hasta los dos años, por ello los propagandistas que dicen entrenar al sistema inmune con las vacunas, se olvidan de que ese entrenamiento no resultará eficaz antes de esa edad. La información que reciben los padres es muy incompleta y sesgada. Es preciso que se responsabilicen de buscar una información mucho más completa y valorando los pros y los contras, tomar una decisión responsable.
Catedrática María José Martínez Albarracín: ¡PELIGRO INMINENTE! Vacuna antigripal nasal infantil