Tom Ozimek.
El hijo del presidente Joe Biden, Hunter Biden, ha sido imputado en una corte federal de Delaware por delitos graves con armas de fuego.
Los documentos judiciales presentados el 14 de septiembre ante la Corte Federal del Distrito de Delaware muestran que Hunter Biden fue imputado de tres cargos en relación con las acusaciones de haber hecho declaraciones falsas a un vendedor de armas y de poseer un arma de fuego mientras consumía drogas.
Dos de los cargos se refieren a acusaciones de que Hunter Biden “hizo a sabiendas una declaración escrita falsa y ficticia, con la intención y el posible propósito de engañar” a un vendedor de armas cuando pretendía comprar un arma de fuego en octubre de 2018.
El Sr. Biden “proporcionó una declaración escrita en el formulario 4473 en la que certificaba que no era consumidor ilegal ni adicto a ningún estimulante, estupefaciente ni ninguna otra sustancia controlada, cuando en realidad, como él sabía, esa declaración era falsa y ficticia”, dice la imputación.
El tercer cargo se refiere a la posesión por el Sr. Biden de un revólver Colt Cobra 38PL “a sabiendas de que era consumidor ilegal y adicto a cualquier estimulante, estupefaciente y cualquier otra sustancia controlada”, lo que, al igual que los otros dos cargos, constituye una violación de los artículos del Título 18 del Código de EE. UU.
Los cargos más graves —el primero y el tercero— conllevan una pena máxima de 10 años de prisión, una multa de 250,000 dólares y tres años de libertad vigilada.
La imputación fue firmada por el abogado especial David Weiss, nombrado para dirigir la investigación por el fiscal general Merrick Garland.
Según una hoja informativa sobre el acusado, el 14 de septiembre se dieron instrucciones para que se emitiera una citación para que el Sr. Biden compareciera por primera vez ante el tribunal, aunque no se dieron más detalles sobre la fecha del juicio.
El equipo jurídico de Biden no respondió inmediatamente a la acusación.
Antecedentes
El 6 de septiembre, el equipo del Sr. Weiss dijo que los fiscales tenían previsto pedir a un gran jurado que imputara al Sr. Biden en un plazo relativamente breve.
“La Ley de juicios rápidos exige que el gobierno obtenga la devolución de una acusación por parte de un gran jurado como muy pronto el viernes 29 de septiembre de 2023. El gobierno tiene la intención de obtener una imputación en este caso antes de esa fecha”, declaró el equipo del Sr. Weiss ante una corte federal de Delaware.
En un principio, los fiscales aceptaron que el Sr. Biden se acogiera a un acuerdo de programa alternativo previo al juicio que probablemente le habría evitado ir a la cárcel, pero ese acuerdo se vino abajo.
Varios medios de comunicación han reportado que el Sr. Biden poseía un arma en 2018 y que su entonces novia, Hallie Biden —viuda de su hermano Beau— arrojó el arma a un cubo de basura antes de que las autoridades la recuperaran. En su autobiografía ha dicho que ese año consumía crack.
Christopher Clark, abogado de Hunter Biden, hizo una declaración previa a los medios de comunicación.
“Sé que Hunter cree que es importante asumir la responsabilidad de estos errores que cometió durante un periodo de agitación y adicción en su vida”, dijo el Sr. Clark. “Está deseando continuar su recuperación y seguir adelante”.
Anteriormente, la Casa Blanca emitió una declaración en la que indicaba que el presidente Joe Biden está al lado de su hijo mientras éste se enfrenta a problemas legales.
“El presidente y la primera dama quieren a su hijo y lo apoyan mientras sigue rehaciendo su vida”, dijo Ian Sams, portavoz de la Casa Blanca. “No haremos más comentarios”.