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¿Qué ha sucedido con Cantabria Distinta? El partido más friki de la taifa de Revilla

Redacción




Miguel Boor.

El partido de frikis más notorio de Cantabria parece al borde de la desaparición después de que sólo les hayan votado sus parientes y amigos más próximos. Sus presuntos líderes y empezando por el presidente, Carlos Toral, se ocultan de cualquier manera y hacen todo lo posible para no dar la cara y reconocer lo bien que lo han hecho para quedar primeros por la cola. La historia de un fracaso anunciado con mucha antelación que ahora va a analizar Michael Boor, quien conoce de primera mano a los responsables de esta merienda de negros llamada Cantabria Distinta y su absurda forma de proceder.

¿Conoces el mayor fracaso de las elecciones municipales en Santander?

Una cosa es llevarse una paliza electoral porque han sido completamente incompetentes y han tirado el tiempo y los recursos disponibles, de la manera más imbécil que pueda haber, dice Michael Boor. Pero otra cosa, muy distinta, es luego no querer dar la cara y reconocer los errores y la falta completa de liderazgo y hasta de lealtad con los que se supone que eran sus propios integrantes y amigos.

Y es que uno de los últimos integrantes en abandonar el barco antes del fracaso final, Michael Boor, expulsado por sus compañeros como represalia por no aceptar los continuos fracasos de estos dirigentes, nos quiere contar ahora cómo fue este proyecto que según él estaba condenado al fracaso desde el principio. Una experiencia sin duda aleccionadora para cualquiera que quiera emprender alguna opción política, de alguna manera, o dedicarse a cualquier esfuerzo de marketing. Porque no se pueden cometer tantos errores y encima querer pasar por gente sobrada y competente.

Somos muchos (en realidad no) los que nos preguntamos qué ha pasado con esta formación política que tanto quería darse a conocer, hasta hace poco, y que hoy se ocultan como bien pueden. La verdad es que no hay manera de que los responsables políticos de Cantabria Distinta den la cara y alguna explicación sobre el fracaso tremendo que han cosechado en las elecciones municipales de Santander últimas. También aprovechamos para hacer un repaso de la trayectoria de este grupo humano con una de las personas que se involucraron en semejante partido de frikis y que es el que os escribe.

¿Conoces ya al partido más friki de Santander y Cantabria?

Ellos mismos se denominaban Cantabria Distinta y la verdad es que tienen una forma de funcionar muy peculiar que es distinta a cualquier otra que yo haya conocido. Porque nada tenía sentido ni lógica en la falta de prisa y ambición por hacer cosas que tenía esta gente. Y todo ello mientras boicoteaban cualquier intento de nadie de llamar la atención para bien y atraer las simpatías escurridizas del santanderino medio.

Y para abundar más en hacer el idiota y comportarse como una secta extraña, pues tal ha sido su proceder desde que se juntaron, en lugar de reconocer sus errores constantes y la falta de liderazgo que padecían, hicieron lo que suele ocurrir cuando no se quiere reconocer que algo estamos haciendo mal: buscar un pagano de la situación y expulsarlo. Por fortuna para mí, fue un servidor quien resultó oficialmente expulsado, por lo que no tuve que me libraron de dejarme arrastrar hacia el ridículo que todos sabíamos que iban a hacer. Todos menos ellos, claro.

 

Cantabria Distinta ha sido un fiasco de partido: A LOS HECHOS Y EL FRACASO ELECTORAL ME REMITO

 

En primer lugar, quería aclarar cómo ha sido mi posición en toda esta historia, ya que gente me está preguntando. Entré en Cantabria Distinta por dos amigos y uno en particular, que sí sabe cómo funciona este mundillo de las elecciones y, de hecho, ha ganado varias, repitiendo este año en la localidad de Mallorca en la cual se presenta. Sin embargo, él ha tenido poco que ver con todo lo sucedido desde que empezó este partido en Cantabria. Y lo único que se le puede decir en este sentido es que (A LOS HECHOS Y EL FRACASO ELECTORAL ME REMITO) escogió mal a las personas que tenían que liderar un proyecto para el que no vale cualquiera. Es decir: no vale que sean personas sin tacha, trabajadoras y hasta emprendedores de negocios, puesto que este tipo de proyecto requiere un desempeño diferente y unas cualidades de carisma y liderazgo que evidentemente no poseían los que han llevado el proyecto hasta su final más absurdo.

 

Luego de entrar a formar parte de su presunto equipo, aunque no hacíamos nada de entidad como puede hacer cualquier organización, sino sólo reunirnos cada cierto tiempo, hemos pasado así dos años sin pena ni gloria hasta que ya no pude aguantar más el nivel de estupidez incompetencia y le dije que me iba hasta que la gente que pudiera estar interesada en esto pudieran contactar, de una p*** vez, con el teléfono que supuestamente teníamos. Luego me engañaron haciéndome creer que ya el teléfono funcionaba, pero yo ya estaba hasta el gorro de ellos y se me ocurrió presentarme por mi pueblo para independizarme de alguna manera sin romper del todo. Pero entonces ellos se dedicaron a boicotearme también con eso, yo creo que por temor de que sacara algún resultado y que ellos quedaran como lo que son: un equipo de perfectos incompetentes.

Las diez cosas que no puedes hacer si quieres ganar unas elecciones

Pero para que esta experiencia sea realmente positiva y en un ánimo de enviar a estos fracasados un mensaje de esperanza, después de la torta que se han dado, me gustaría proponer los diez puntos imprescindibles para perder unas elecciones que ellos han seguido a muerte.

1.    Carecer de visión de objetivo

La visión de objetivos lo más importante en toda estrategia y a ellos les ha faltado por todas partes. Yo lo que nunca tuvieron claro que el objetivo final era ser votados por la gente de forma masiva, pues aspirar a ganar un concejal con la estrategia de los doscientos votos como mucho que han sacado es una estupidez. Además, se liaron mucho en establecer cuáles eran las prioridades del partido para la ciudadanía y cambiaron por el camino el ámbito en el que se iban a presentar, concentrándose en el Ayuntamiento de Santander, que es precisamente el más difícil de toda la región.

2.    No querían pelearse con nadie: meterse con el PP o con Vox no es nuestra guerra

También llegaron a decirme textualmente que meterse con el PP o con Vox no es nuestra guerra, cosa absurda cuando la mayoría de la gente que vota de la ciudad y la región son peperos cerrados y se supone que tienes que ofrecer algo diferente a ellos y marcar esa diferencia.

3.    La falta de estrategia de los medios

Si yo quiero clavar un clavo necesito un martillo, no un pañuelo. Y esta gente ha intentado por todos los medios ganar las elecciones sin disponer de ningún medio para darse a conocer en primer lugar.

 

Pero, vamos a ver, pedazo de alcornoques: ¿cómo vas a ganar las elecciones si no te conocen ni en tu casa?

 

Y lo mejor de todo es que al único que realmente enviaba a cosas a medios y conseguía que alguien del planeta se diera cuenta de que el partido existía, que era éste que os habla, se le hacían reproches precisamente por esto y hasta había unas broncas tremendas por cualquier mínimo detalle. En pocas palabras: la única oportunidad seria que tenían y que han tenido de salir en los medios y, además, gratis, fue seriamente combatida por ellos mismos, en un alarde de estupidez que a mí me tenía que haber ya convencido del todo de que esta gente no estaba en sus cabales y que me tenía que haber largado de ahí cuanto antes.

4. La falta de liderazgo era tal que cualquier indocumentado podía llegar por allí y asumir el mando

O como mínimo dirigir el orden del día de las reuniones, como nos pasó con algun aventado que apareció por allí un día concreto y se puso a declamar cualquier estupidez mientras yo me desesperaba intentando comprender por qué el primer indocumentado o personaje en general que entraba por la puerta tenía allí mando en plaza y nos dirigía la reunión.

 

De hecho, una de las últimas y raras adhesiones de última hora fue por parte de una excéntrica, rebotada de otros partidos, que tomó rápidamente el liderazgo que nadie lo ejercía y mucho menos el presidente ni el candidato estrella. Es decir: no es culpa del primer o último incompetente que aparece por la puerta que se le deje asumir el mando si todos los demás (todos) son incapaces de tomar una decisión correcta ni organizarse. Ella estaba actuando de forma natural, como es esa persona, y el problema era más bien que nadie quiso o no pudo ponerla en su sitio.

5.    Las reuniones sin más no sirven para nada

Como diría el ex presidente del Betis, Lopera, en ese famoso vídeo en el que recrea la salvación del club, las reuniones sin más no sirven para nada. Las reuniones tienen que tener un objeto práctico y yo sólo he vivido realmente una reunión operativa en todo el tiempo en que estuve allí. Reunión que yo mismo tuve que programar y llevar a cabo con unos puntos del día claros, ya que el presidente del partido o el candidato no eran capaces de mantener un orden ni presentar unos objetivos de nada.

6.    No medir el tiempo disponible que tienes para lanzar tu proyecto

Pese a que el verdadero fundador del proyecto, José Paco, que sí ganó sus elecciones en Mallorca, les ha insistido desde el principio a estos personajes en la realidad de que no tenían tanto tiempo, cuando aún contaban con dos años por delante, este equipo tan competente se ha puesto a las pilas exactamente un mes antes de las elecciones.

 

Pero, además de eso, insisto en que esta gente le sobraba todo, puesto que me boicotearon en mis humildes intentos de darles a conocer en todos los medios que se hacen eco de mis entrevistas y mis artículos y demás. El colmo.

 

7.    La obsesión con una imagen que no tenían ni esperaban

Yo creo que se pensaban que eran el PP o algo así y que ya tenían una imagen consolidada, pero hay que ser un poco estúpido para no ver que no te conocen ni en tu casa y encima poner piedras en el camino a los que intentábamos que realmente se dieran a conocer.

 

Simplemente se conformaron con poner a un señor bastante limitado, en este sentido, a llevar unas redes sociales cuyo máximo éxito era recibir cinco “me gusta” en una de sus constantes y a la vez vacías publicaciones. Porque todo lo que no tenga un propósito claro y un camino concreto es una auténtica paja mental. Y las redes sociales sólo funcionan para objetivos empresariales o de organizaciones cuando metes dinero ahí, pues de lo contrario te ocultan y te restringen a tus amistades, que son los que ya te conocen. Un error muy típico de cualquier gestor de proyectos actual el pensar que las redes sociales son gratis para objetivos de este tipo las plataformas no diferencian entre una empresa o una ONG. Si quieres que te conozcan, ellos quieren tu dinero y se acabó. Pero esta gente no entendía que las cosas funcionan así a pesar de mis esfuerzos por explicárselo.

8.    Lo mejor es no salir en los medios y escondernos un poquito, claro

Así, por supuesto, seguro que nos votan mejor. Pero, ¿qué se les puede pedir si su proyecto estrella para darse a conocer era invertir en una suscripción de un periódico local?

 

Pero aquí no acaban los disparates. Porque estábamos pagando entre todos una tarjeta de teléfono, presuntamente para que nos pudieran contactar, y a dos meses de las elecciones me entero de que dicho móvil está en un cajón y apagado. Y todo porque el presidente del partido, que se dedica entre otras cosas a vender teléfonos, lo tenía extraviado de una mudanza.

 

Yo creo que el chiste se cuenta solo, pero claro, había que buscar otros culpables. El supuesto jefe no puede asumir su fracaso como líder, pues estamos en España y asumir responsabilidades no va con nosotros.

9.    Falta de moral de victoria

Derivado de todos estos factores negativos deviene la falta de motivación o moral de victoria. Porque cuando no crees que la victoria es posible la conviertes en imposible. Y cuando crees que puedes ganar, aunque lo tengas todo en contra, como era el caso de Cantabria Distinta, ya tienes lo más importante para obtener ese triunfo final.

El ejemplo más claro que se me puede ocurrir siempre es lo que ocurrió en la Guerra Civil Española: mientras un bando lo tenía todo en su contra, pero creían firmemente que el futuro era suyo y concentraron esfuerzos para ganar, en el lado supuestamente gubernamental se dedicaron a exactamente lo contrario. A dividir sus fuerzas y esfuerzos para al final no poder ni siquiera creerse que podían conseguir algo que no fuera llevarse paliza tras paliza. Pues algo muy parecido le ha pasado a esta decena escurrida de idealistas, entre los que yo estaba (mea culpa): su falta de todo para ganar les desmoralizaba y entraban en un círculo vicioso en el que su falta de moral les bloqueaba para hacer nada. Una situación que a todos nos ha pasado alguna vez.

La falta de moral de victoria de la directiva de Cantabria Distinta y su escueta militancia

La verdad es que cuando he realizado mis llamadas de mofa y befa a esta gente, para cachondearme un poquito y felicitarles por la victoria conseguida, he omitido a algunas personas que no me parecían interesantes por su falta total de liderazgo en la organización. Porque siempre pasa que al final hay candidatos y luego hay gente que realmente es la que manda por detrás y aquí se ha notado mucho quién mandaba: tres grandes incompetentes que responden a los nombres de Victoria, Carlos Toral y un tal Mariano. Por ese orden. Porque los demás no pintaban gran cosa y asumieron un camino torticero que estos tres diseñaron.

Y hablando del candidato por Santander, Sinforiano Bezanilla, quiero dejar aquí constancia de lo bueno que es creer en el triunfo final si quieres conseguirlo. Algo que realmente no se creía ni él y paso a comentar dos ejemplos muy claros.

En una ocasión, cuando ya me estaba presentando por mi pueblo y por mi cuenta, tratando de desentenderme de semejante forma de desorganización, pero sin romper del todo con ellos (no sé si por pena), el candidato de Cantabria Distinta por Santander me hizo la siguiente revelación:

 

“Mira a ver que te puedan votar los que salen en tu lista, pues no sería la primera vez que alguien sale con menos votos que gente presentada en una lista”.

 

Yo me quedé bastante sorprendido ante su consejo, la verdad, y le contesté que si creyera que iba a sacar menos votos que gente en mi lista no me presentaría. No haría ni siquiera ese esfuerzo si no era para salir a ganar de alguna manera, cosa que en Bezana era más plausible que en Santander, aunque fuera yo solo, simplemente porque hacen falta muchos menos votos. Y es una población mucho menos conservadora y cerrada como la de Santander, que votaron masivamente al PP y sus marcas blancas. Como siempre.

 

10.  La penúltima idea de bombero: no hace falta teléfono para que te contacte la gente (la telepatía es mucho mejor)

 

También me llamó la atención que cuando yo le eché en cara la falta de teléfono operativo, porque nunca tuvimos teléfono hasta última hora, me dijera que el teléfono en realidad no sirve para nada de y que la gente sólo llama para molestar de vez en cuando. Que esa era su experiencia personal como jefe de un partido en el que lógicamente tampoco ha ganado unas elecciones en su vida ni se ha acercado lo más mínimo.

 

Un candidato que te viene con semejantes argumentos de perdedor es un perdedor profesional, que no cree en la victoria ni hace ningún esfuerzo por conseguirla. Esto es sinceramente lo que pienso y me estoy ciñendo al proyecto del que estamos hablando y no a otras consideraciones más personales. Simplemente estoy manifestando lo que he tenido que aguantar con semejante liderazgo de personas que siempre han estado ligadas de alguna forma a esto de la política, más bien de forma idealista, pero que no tienen ni idea de lo que hay que hacer para salir a ganar con un equipo competidor. Eso sí me ha quedado claro.

¿Cómo puedes decir, ya de entrada, que no necesitas un teléfono porque no te va a llamar nadie?

¿A alguien que no sea retrasado mental se le ocurriría poner a la gente a repartir propaganda en la que no hay NINGUNA manera de ponerse en contacto con el que se anuncia? ¡Menuda jefatura!

 

Pero esto que puede parecer obvio para cualquiera lo era mucho más para mí, ya que yo me dedico precisamente a que las empresas sean visibles y las pueda contactar la gente, por lo que mi primera preocupación es que aparezca siempre un teléfono o un correo o alguna forma de contacto rápida. Pero esta gente son enemigos de la publicidad y de que te conozcan: se plantearon el partido como una secta y secta han sido. En realidad, parece casi un milagro que les pudieran votar doscientas personas con semejantes mimbres, señal de que se han pegado un buen trabajo de última hora, pero un trabajo completamente inútil. Hay que estudiar cuando se está a tiempo y no después.

A un mes de las elecciones, si no has hecho nada previamente, lo mejor es que te vayas a tu casa a descansar y lo des por perdido. Pero ellos siguieron hasta el final y desperdiciaron sus energías y su ilusión con un caballo perdedor que no sabía ni a dónde iba.

 

Unfit for command (no preparado para el mando)

 

Una persona que piensa ya de antemano en que puede hacer el ridículo y que es tampoco importante o motivador lo que propone que no le puede llamar nadie en serio es una persona que está incapacitada para liderar nada ni para presentarse a nada. Es una persona que se autolimita, que no cree que puede ganar y por tanto limita también a los demás. Pero no era el único. El propio presidente del partido, Carlos Toral, estaba en esa misma línea cuando su mayor anuncio en todos los años de supuesto liderazgo fue restringirse a Santander como único sitio en el que se iban a presentar realmente. Es decir: su estrategia era tan mala que él mismo reconocía que había unos límites muy claros. Y realmente nunca hubo una creencia profunda en que se podía conseguir nada porque si empezamos así, con tan poca ambición y tantos límites impuestos, el resultado sólo puede ser el que ha sido. un fiasco tremendo que no tiene paliativos.

 

Carlos Toral: un líder que se quitó de en medio como candidato a presidente de Cantabria sin atreverse ni a intentarlo

 

Sin embargo, el caso de Carlos Toral es todavía más serio, pues él mismo se quitó de en medio como candidato a presidente de Cantabria sin atreverse ni a intentarlo, por lo que no hay mucho más que se pueda decir sobre un líder que no sale a la pelea porque reconoce que es un incapaz para el puesto. Te pongo un cero patatero, amigo, pero a expensas de que puedas recuperar en septiembre si te pones en contacto conmigo y te defiendes de todos estos argumentos como mejor quieras.

 

Más tarde, por lo que tengo entendido, se lo pensó mejor y sí se presentó (es que no me aclaro con este personaje). Definitivamente, un iluso se ha subido en una nube y no quiere bajar. Dice que no ha tenido los resultados que esperaban en Santander como si se hubieran presentado en más sitios aparte de allí y en un pueblo pequeñito que no conocen ni los de acá. Y también comenta que han detectado una necesidad de cambio, no te jode, con toda la corrupción del PRC y sus amiguitos de otros partidos como el PP a lo mejor te piensas que todo el mundo es tan imbécil de estar tan a gusto. Pero el problema es que no han sabido explotar la mayor oportunidad que ha habido en la provincia y en todo el país para iniciar un proyecto político nuevo.

 

El ridículo que han hecho los amigos de Cantares Distinta es considerable en número de votos

 

Pensemos una cosa: los frikis de Cantabristas, que era otra fricada de partido de por aquí, después del trabajo real que se han pegado en la calle y de las oportunidades que sí han aprovechado, para salir en la prensa local, se han quedado a las puertas de lo que hubiera sido el mismo triunfo al que aspiraba Cantabria Distinta: tener un concejal en el Ayuntamiento de Santander. La diferencia es que, en su caso, se han quedado realmente a muy pocos votos de sacar algo, por muy frikis que sean, y la diferencia con el ridículo que han hecho los amigos de Cantares Distinta es considerable en número de votos.

 

Y conste que digo todo esto para que pueda servir a más gente este cúmulo de errores y estupideces, porque se puede aprender en cabeza ajena y se debe, no siendo necesario que otro cometa el mismo error. Y estamos hablando también de errores típicos que me encuentro a menudo en mi desempeño profesional, incluso con empresas grandes, que al no tener demasiadas nociones de marketing o no pensar bien algunas cosas cometen errores o dejan pasar oportunidades.

 

Lo más curioso es que mi tío llegó a decirme que mi partido estaba financiado por el PSOE, sin duda, puesto que todo lo que no vaya a favor de la mayoría de votantes peperos debe ser una especie de conspiración judeomasónica, pero nada más lejos de la realidad. Esta gente era tan inepta y absurda en su forma de proceder que nadie con cabeza hubiera apostado por ellos jamás. Eran tan cabestros que se hacían la guerra a sí mismos, por todo lo comentado, luego está de más especular tanto.

 

Eran un grupo de frikis que se pusieron un objetivo muy complicado

Eran un grupo de frikis que se pusieron un objetivo muy complicado y luego hicieron todo lo posible para ponerlo totalmente fuera de su alcance.

 

Y lo fácil ahora será echarle la culpa a un electorado envejecido y conservador en lo malo, que se agarran al PP como si fueran los héroes del dieciocho de julio o algo así, pero la realidad es que era imposible una victoria en la que nadie creía. Han faltado conducción, moral de victoria, visión de objetivo, estrategia de los medios y hasta lo más esencial en cualquier cosa que hagas en la vida con más gente: la lealtad. Y se ha exagerado hasta el máximo el valor de la bondad y la ingenuidad de algunas personas como cosas que puedes ofrecer a la gente. Porque hace falta mucho más y, para empezar, no tratar mal a los que te están intentando ayudar y forman parte de tu equipo. Pero hasta en esto también ha sido bajos y baratos y soy prueba de ello. Por todo esto y por mucho más os merecéis lo que os ha pasado y me alegro mucho, porque era justo es necesario. Ahora os podéis ir a llorar a vuestra casa y seguir preocupándoos de vuestra imagen inexistente, que la verdad es que sería bueno que nadie conociera, más que nada para no exponeros más al ridículo.