Zachary Bieber.
Moderna informó sobre un descenso de los ingresos en el primer trimestre de 2023, debido a las menores ventas de sus vacunas contra COVID-19.
La compañía farmacéutica obtuvo unos ingresos de USD 1900 millones en el primer trimestre de 2023, un 68% menos que en el primer trimestre de 2022. La mayor parte de los ingresos procedieron de aplazamientos de 2022.
Las perspectivas para este año no han cambiado. Moderna está esperando ventas de la vacuna contra COVID-19 por USD 5000 millones para 2023, basadas en gran medida en los acuerdos de compra anticipada de los gobiernos.
Los ejecutivos también están negociando contratos con farmacias, hospitales y organismos gubernamentales de Estados Unidos, Japón y Europa, y recientemente llegó a un acuerdo para más dosis para Australia. La farmacéutica calcula que los estadounidenses recibirán 100 millones de dosis anuales de vacunas contra COVID-19 en el futuro.
Recientemente, las autoridades estadounidenses permitieron y recomendaron una dosis adicional de la vacuna a determinados grupos de población, pero su aplicación ha descendido drásticamente desde un máximo alcanzado en 2021.
El marco actualizado imita a cómo se fabrican y aplican las vacunas contra la influenza. Los expertos examinan las variantes circulantes y recomiendan fórmulas actualizadas, y las empresas que fabrican las vacunas producen entonces nuevas versiones cada año. Está previsto que los funcionarios de la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. se reúnan con sus asesores en junio para debatir y recomendar qué cepa o cepas deben ser el objetivo en otoño e invierno.
El gobierno estadounidense ha estado comprando vacunas contra COVID-19 y suministrándolas sin costo adicional para los contribuyentes, pero las vacunas pasarán al mercado comercial a fines de este año.
Las vacunas contra COVID-19 de Moderna son sus primeros productos, pero la empresa está trabajando en una serie de otras vacunas, incluida una vacuna combinada contra la influenza/COVID-19.
En 2024, espera lanzar vacunas contra la influenza y el virus respiratorio sincitial. También está en preparación una vacuna contra COVID-19 actualizada y estable en frigorífico, para la que se ha iniciado un ensayo de fase 3.
La empresa ganó unos USD 36,000 millones con las vacunas contra COVID-19, las que se han utilizado ampliamente en todo el mundo.
Pero su eficacia ha ido empeorando con la aparición de nuevas variantes. Los datos estadounidenses indican que las vacunas no protegen bien contra la infección sintomática y proporcionan una protección de corta duración contra la enfermedad grave.
Moderna ganó USD 19,300 millones en 2022, ligeramente más que en 2021. Había dicho que esperaba perder dinero en 2023. La compañía proyecta ventas anuales de entre USD 8000 y USD 15,000 millones para 2027 si algunas de las nuevas vacunas son autorizadas por los reguladores.
Pfizer, su principal competidor en Estados Unidos, declaró esta semana unas ventas de USD 7100 millones por sus vacunas contra COVID-19 y su tratamiento con una píldora. Los funcionarios dijeron que la caída de las ventas era de esperar. Pfizer también está trabajando en una vacuna combinada contra influenza/COVID-19 y prevé una demanda anual superior a 76 millones de dosis.