Enrique de Diego.
Leches, Pepe Álvarez, secretario general de la UGT, ex Unión General de Trabajores. ahora Unión General de Vagos Subencionados, que te has ido a París de turismo sindical y la has liado biena, has asaltado la sede de Black Rock y la has prendido fuego. Del asalto si hay imágenes, aunque los medios de prostitución estén callados como furzias mediáticas, como las llama el gran César Vidal, que cada día está más fuerte y con muchísimos más seguidores que cualquoer enano morboso chapero. Pero no hay testimonio gráfico de tu participación, Pepe, tío, mecachis, con lo bizarro y lo sindicalista que estabas con la bengala entrando en la cloaca máxima del capitalismo salvaje y no haber una mísera cámara para inmortalizarte en el único momento digno de tu asquerosa vida, ni un mal movien para hacete un selfies. ¡Oh! qué furia revolucionaria en ese asalto a La Bastilla de hoy. Ibas en plan sanscoulotte con la cigala callendote por la comisura de los labios. Han gritado ¡A las barricadas! y has marchado –Allons, enfants de la Patrie…– a las mariscadas, pero con tiempo para participar en el asalto a la cárcel del Capeto.
Es que donde vas, la lías y te merecías en tu turismo sindical diez minutos de gloria, porque por estos lares estás más callado que una puta babilónica, que el gabacho Macron sube la edad de jubilación a los 65 años y aquí te la sube Perico a las 67 y silente, macho, que para algo sirven las subvenciones multimillonarias, para tapar bocas. Necesitabas, hasrto de tanta roña complaciente, de tanto hacer el paripé, un baño de lucha obrera contra los sucios globalistas, esos a los que rinde pleitesía Perico que hasta le da 125 millones, que se necesitan cojones, para que nos mate, como si tuviera poco dinero el tarado de Bill Gates. Que sí, hombre, Pepe para los amigos, que te has portado partiéndote la cara con los antidisturbios, que los has puesto en fuga. ¡Glorioso! Has estado más que glorioso con el gorro frigio y la escarapela tricolor pidiendo la guillotina para el globalista Macron.
Ya has visto, tú que lo creías haber visto todo, como está la Françe de revuelta, ahora cuando vuelvas a España de tus jornadas de turismo sindical dedícate con tus liberados a incendiar España, que buena falta hace, que estamos hasta los cojones de este sistema de mierda. Abandona, si es necesario, y vaya si es necesario, las subvenciones y lanza a tus liberados a echar abajo el sistema.
¡Ah! Pero si tú eres el sistema, si tú eres sindicalistta de mentira, si tú eres el enemigo de la clase obrera, si tú eres el lacayo adiestrado de Black Rock, así que cuando veas las barbas de Black Rock quemar, pon las tuyas a remojar, porque vamos a por ti, pringado, ultra subvencionado.