El mundo del espectáculo se levanta hoy consternado con la muerte de Kirstie Alley, actriz conocida por su papel en Mira quién habla. La artista, también conocida por la serie Cheers, ha muerto a los 71 años. La causa del fallecimiento es un cáncer fulminante que le habían detectado recientemente.
Los hijos de la actriz, True y Lillie Parker, han informado de la triste noticia a través de las redes sociales. Lo han hecho con un mensaje desde la propia cuenta de la actriz fallecida en Twitter: “Estamos muy tristes al informar de que nuestra increíble, feroz y amorosa madre ha fallecido tras una batalla contra el cáncer”.
La actriz estadounidense Kirstie Alley dio sus primeros pasos en el cine en 1982 con la película Star Trek II: The Wrath of Khan. Después hizo más películas como A Bunny’s Tale, en 1985, y Stark: Mirror of Age, en 1986. Pero saltó a la fama con Mira quién habla junto a John Travolta en 1989.
Ha muerto rodeada de los suyos
La familia de la actriz ha anunciado su fallecimiento poco después de que le diagnosticaran un cáncer terminal. La artista ha pasado sus últimos días rodeada de sus seres queridos mientras luchaba por su vida. Sus allegados han destacado su dura pelea contra el cáncer y su figura como pilar de la familia.
“Ha luchado con fortaleza, y más allá de su figura icónica del cine mejor aún fue su papel como madre y abuela”. El mundo la recordará como una actriz inolvidable, ganadora de dos premios Emmy. Además de su faceta como actriz hizo también de guionista y productora en la industria del entretenimiento.
En 1987 obtuvo su primer gran papel como parte de Cheers, una de las comedias más populares de la televisión en Estados Unidos. Hacía el papel de Rebecca Howe, la gerente de un bar que aspiraba a casarse con un millonario. Este papel le valió un Emmy a la mejor actriz en 1991.
Una actriz inolvidable
Su papel en Cheers también le valió un Globo de Oro a la mejor actuación de una actriz en serie de televisión. Su otro gran trabajo fue Mira quién habla, donde daba vida a una madre soltera que se enamoraba de un conductor de taxi. Su dueto con John Travolta la convirtió en todo un éxito cinematográfico.
Tanto es así que después de la fama alcanzada se hicieron dos películas más con la misma trama. Su carrera en el cine estuvo también marcada por programas escritos por ella, como Los secretos de Verónica o Fat Actress. Hizo también de productora, promocionando otros productos de gran interés.