AYÚDANOS A COMBATIR LA CENSURA: Clicka aquí para seguirnos en X (antes Twitter)

FIRMA AHORA: El manifiesto contra el genocidio de los niños


Carta del Editor: Para cuándo las guillotinas o el garrote vil

Redacción




Enrique de Diego.

Existe una aversión reverencial a la violencia legítima porque estamos corroídos de esa enfermedad letal que es el buenismo. Empero, cuando decenas de miles de compatriotas mueren fulminados, cuando las carreras de bicis o los conciertos se visten de luto, en una sobremortalidad espantosa. Cuando miles de compatriotas nuestros, familiares y amigos, padecen enfermedades autoinmunes nunca vistas y está sometidos a atroces tormentos y suplicios, con el temor a morir en cualquier momento con el temor de no quedar como testigos de la matanza inmisericorde perpetrada por los políticos, la cloaca mediática y los pútridos médicos asesinos, cuando no han hecho nada malo tan sólo acudir a los mataderos para que les inyecten unas enfermeruchas el veneno letal por la asquerosa solidaridad -¡cuántos crímenes se han cometido en su nombre- y en una transvaloración completa, por su salud y la de los suyos. Cuando todo eso ocurre, cuando se ha atentado contra la vida de los ciudadanos, de los niños en una matanza cruel, el 20,1% de sobremortalidad en niños canarios, que se dice pronto, y ¿los padres y las madres no se indignan y rajan las vísceras de los culpables de tal masacre?, la violencia es legítima, es imperiosa y necesaria, urgente y obligada; el tiranicidio es legítimo, tal y como se establece por el Padre Juan de Mariana en su obra De rege et regis institutione,

Ursula von der Leyden con el CEO de Pfizer, Peter Bourla.

Se considera una importante victoria que en el Parlamento Europeo la directora de Pfizer haya reconocido que no se hicieron experimentos para comprobar la transmisión porque se corrió a la velocidad del mercado y que se haya desvelado que los contratos con Pfizer son secretos, así, secretos. Lo cual puede ser entendido como el reconocimiento de que todo fue una gran mentira y un fraude o como que en Pfizer se ríen de nosotros y nos dicen a la cara que la timo vacuna no sirvió para nada y el Parlamento Europeo sirve para cobrar y callar y que preguntar es ocioso. Pero son esos mismos europarlamentarios que apoyaron el pasaporte covid y no levantaron la voz con las restricciones y que han soportado como la ultra corrupta Ursula von der Leyen quería liderar la timo vacunación obligatoria.

NO TE LO PIERDAS:   REPENTINITIS: Fallece un transeúnte en plena calle en la céntrica Plaza del Pilar de Ciudad Real

Porque la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad es que esas timo vacunas no tenían otro objetivo que eliminar población, que matar, que es lo que están haciendo y es lo que debería haber confesado la directiva de Pfizer, cuya sede debe ser asaltada, por criminal y genocida. Todo ha sido preparado minuciosamente para esa terrible matanza: el gerontocidio, el confinamiento y las timo vacunas, cuyos terribles efectos los conocemos, pero están por venir.

Aquí lo que hace falta ya, pero ya, más pronto que tarde lo que pedía y le asombraba que no hubiera a Michael Yeadon, jornadas, noches de antorchas y horcas. Mientras no las haya, las victorias serán meros juegos florales. Tiene que haber violencia legítima, proporcional, el duplo de la que han ejercido ellos, los nauseabundos y tarados globalistas, como indica el Apocalipsis, los políticos, los periodistas, sobre todo de las televisiones, los médicos y el personal sanitario que haya participado o sido cómplice por omisión tiene que ser pasado por las armas tras un juicio sumarísimo. Y sigo sin comprender que los padres engañados de los hijos muertos por las timo vacunas no pierdan la cabeza y se tomen la justicia por su mano o los esposos de las embarazadas que han perdido a su bebé no se tomen venganza. ¿Para cuándo las guillotinas o el garrote vil, más bizarro y más doloroso? Este genocidio clama al Cielo y reclama sangre de los culpables.