Enrique de Diego.
El sistema político se comunica mediante la mentira; miente siempre, miente por sistema, miente al por mayor. En el caso de Esther López, la joven desaparecida y muerta en Traspinedo, la mentira es grosera, intragable y asquerosa; la mentira no la deja descansar en paz y ha sembrado de dudas insidiosas a varios vecinos de la localidad.
- Esther López no murió por violencia de género sino por Repentinitis, por una hemorragia interna de toras que es un efecto de la timo vacunación.
- Esther López estuvo muerta en el lugar en que fue encontrada casualmente por un senderista.
- Esther López nunca fue atropellada, ni un poquito como dicen ahora.
Pues, tras el ridículo de Pedro Sánchez, de Victoria Rosell y de Luis Tudanca condenando el asesinato por el heteropatriarcado, y el abracadabrante de la Guardia Civil que no buscó donde tenía que buscar, pero só hizo un despliegue de medios para la televisiones, peinando el río Duero, viene el de la titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Valladolid, Soledad Ortega, encargada de investigar la muerte de Esther López, ha citado a declarar para el próximo lunes, 25 de abril, en calidad de investigado al hoy principal sospechoso, Óscar S.M., después de haber registrado su casa con fruición durante cuatro días. El joven, dueño de dos tiendas en Valladolid, una de las cuales ha aparecido vandalizada, ha sido interrogado durante ¡ocho horas! en la Comandancia. Se han enviado las muestras a Madrid, junto con distintas piezas del Volkswagen T-Roc del investigado-
Es la segunda víctima colateral, tras Rafael, «El Manitas», al que se detuvo y encarceló durante 72 horas, y la ex Benemérita le pilló tratando de salir de España…a Cuba, para casarse. «El Manitas» se puso en huelga de hambre durante la detención. Y todavía hoy ve sus derechos vulnerados impidiéndole abandonar el territorio nacional, y suponemos casarse, cubriéndose así de gloria Soledad Ortega.
Pero la inútil subdelegada del Gobierno, Virginia Barcones dijo que el caso se resolvería costará lo que costará y el coronel de la Guardia Civil. Juan Miguel Recio, quiere ascender a general, cuestión que depende del Consejo de Ministros. así que lo que le manden.
Se vuelve a la tesis del atropello, suave, muy suave, pero la joven no murió al ser arrollada, sino por un shock posterior; es decir, por una hemorragia interna. El atropello vendría justificado por lesión en la cadera, que unas veces está rota, y otras magulladuras leves, y otra una luxación. Poca justificación, aunque hay una cronista de sucesos que aparece ahora, Nacho Abad, sabelotodo. Las magulladuras pudo hacérselas Esther López al caer rodando por la cuneta.
Hasta ahora nadie ha superado la explicación contundente y concluyente de la Catedrática María José Martínez Albarracín. La hemorragia interna en toras y abdomen es producida por un macro coágulo causado por la timo vacuna. «El territorio de la vena esplénica, procedente del bazo y que drena sangre en la vena porta: un gran tronco venoso que se dirige hacia el hígado y que está formado por la confluencia de la vena esplénica y las venas mesentéricas que recogen la sangre del intestino. El término “hemorragia interna” suele referirse a una hemorragia visceral, frecuentemente de estos territorios vasculares y, sabemos que las inoculaciones covid, activan el sistema linfático y las células linfoides activadas se concentran precisamente en el bazo. La hemorragia digestiva o “hemorragia interna” es pues una complicación relativamente frecuente de estas mal llamadas vacunas».
Pero el sistema sigue sin reconocer su error y su mentira. Esther López murió de repentinitis, como tantos compatriotas están cayendo fulminados, sólo que en vez de hacerlo en una calle, fue a sufrir el ataque en medio del campo de su Traspinedo natal, en eso tan cursi y tan hortera de la España vaciada.