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¡Clama al Cielo! El caso de Diego Armando Montiel

Redacción




Luis Bru.

Diego Armando Montiel estaba llamado por el fútbol desde su misma cuna, cuando su padre, llevado por su pasión, quiso bautizarle con el mismo nombre que su ídolo, Diego Armando Maradona. A sus 25 años, tenía toda una vida por delante, muchos goles por marcar, como el del día de 2014 su debut al River Plate, como se ve en el vídeo. Sueños e ilusiones. Quizás formar una familia, tener hijos y nietos a los que contarles el golazo que, con el Atlético Rafaela, le marcó al River. Todas esas ilusiones que tiene un joven a los 25 años, capaz de comerse el mundo.

Ingresó el día de Navidad en el hospital de San Juan Bautista de Santo Tomé y murió al domingo siguiente. Mereció, en esta siega cruel e inmisericorde de futbolistas muertos, colapsados, 370 casos en 2021, un obituario en casi toda la prensa, pero ninguna referencia al veneno de muerte que le habían inyectado.

Pero Diego Armando Montiel escribió un tuit que es una acusación en toda regla: «Estos a punto de morirme. No me vacuno nunca más», que deja claro lo que él sentía con un pie en el estribo y cual era la causa de sus sueños truncados.

El fútbol se ha convertido en un deporte de altísimo riesgo y leyendo las páginas de los periódicos nadie sabe porqué, nadie quiere decir la palabra prohibida: pinchazo de bio terrorismo. Pero esa es la realidad evidente. Todos los futbolistas se han inyectado, siguiendo el dictado de sus políticos, de sus directivos, de sus equipos médicos, de los malditos protocolos que tanto daño han hecho, que tanta responsabilidad han, aparentemente, difuminado. Todos para poder viajar, para poder jugar. Ese «no me vacuno más» es toda una requisitoria a todo ese mundo de dirigentes psicópatas, a Bill Gates, a las farmacéuticas, a la clase política y mediática.

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Diego Armando Montiel ha muerto sin poder realizar sus sueños, ni como futbolista ni como hombre. Los poderosos de este mundo decidieron que sobraba, que había que eliminar población, sin atender a los sentimientos y los sueños del que nació para ser una estrella del fútbol. De él, aquí en la tierra, sólo nos queda el recordado golazo en 2014 al River Plate que se ve el vídeo. Pido una oración por su alma y por las almas de todas las víctimas de este genocidio planetario.