Según publica El Periodic del Mediterraneo, la Guardia Civil de Castellón está de luto. El motivo no es otro que la pérdida de Diego Hernández, un agente de 62 años que pese a haber recibido las dos dosis pertinentes de la vacuna ha fallecido tras contagiarse de covid. De hecho se encontraba a la espera de recibir la tercera dosis. El virus se ha llevado por delante así, de forma sorpresiva, la vida de un guardia civil que defendió el cuerpo en destinos como el País Vasco, Aragón, Cataluña o Comunidad Valenciana.