Editorial.
Ante la postura alocada, irracional, acientífica y nítidamente totalitaria de la CEOE, expresada con su habitual garrulería por su todavía indigno presidente, Antonio Garamendi, el único sindicato que ha levantado su voz, ha establecido críticas y se ha opuesto radicalmente ha sido Solidaridad, el sindicato de Vox. Este sindicato ha expresado que Garamendi «se piensa que los trabajadores son propiedad de las empresas y pueden decidir sobre su vida privada».
Los pasos de la oscura estrategia empresarial nos parecen claros: en su servir viaje a Estados Unidos, a Pedro Sánchez le ordenó George Soros a que impusiera la vacunación obligatoria; Pedro Sánchez argumentó que era contraria a la Constitución, pero quedó en buscar una solución. En la CEOE entra Pfizer e inmediatamente el chapero del Gobierno que es Antonio Garamendi trata de hacer estallar la Constitución y entrar de lleno en el terreno del delito planteando la timo vacunación obligatoria, llena, por de pronto, de efectos adversos, muertes repentinas y, según opiniones de reputados científicos con independencia de criterio, esas consecuencias serán más graves a medio y largo plazo, en forma de enfermedades autoinmunes. Pedro Sánchez, a través del chapero Garamendi, consigue así revestir el pedido de Soros del diálogo social, con CC OO y UGT en primer tiempo de saludo, subvenciones, como la CEOE, y las consiguientes mariscadas.
Ante esta actitud, y toda vez que Solidaridad es el único sindicato que defiende en este tema la libertad, es conveniente afiliarse a Solidaridad, para tener una mejor defensa ante una medida totalitaria, y contar con su respaldo y el de sus servicios jurídicos ante tal atropello del mínimo de libertad y de salud, ante las memeces globalistas. Los servicios jurídicos de Liberum están saturados, oponiéndose a la tenaz ofensiva de las instituciones democráticas, que han perdido su legitimidad de ejercicio, y es conveniente para los trabajadores buscar el resguardo y el apoyo de Solidaridad.
Recomendamos vivamente a nuestros lectores, tras preguntar por sus derechos en el sindicato y sus servicios jurídicos, afiliarse a Solidaridad.