José Luis Mazón Costa. Abogado.
A Enrique de Diego le pasa lo que a tantos que no meten la cabeza debajo del ala ante una realidad perversa e inaceptable, la de que hay una “corporación” una entidad de nuevo signo y poderío que al controlar al poderoso caballero (tal vez una invención de los antepasados de esta elite) se ha hecho ama y señora del mundo y que están usando medios de envenenamiento masivo de la población, incluyendo a los niños, con fármacos experimentales a los que falsamente llaman vacunas y cuyas consecuencias secundarias recorren desde la muerte consecutiva al fármaco a graves taras de salud que causan escándalo en los consultorios de los médicos de familia a los que acuden los afectaos, pero que la institución sanitaria, como colaboradora de estos planes genocidas, oculta con ahínco y bajo amenaza a la población hasta que llegado un punto eso ya no sea posible. Cuando la masa crítica alcance su punto de explosión.
En este marco obsesivo y natural de defensa de la condición humana de produce la entrevista.
Matamoros es un conocido personaje que se hizo famoso por ser parte de la farándula de Tele 5.
De su participación en el circo mediático de la Tele reconoce y entona el “mea culpa” que cometió agravio contra el género humano y que está arrepentido:
Al punto de que creo haber adquirido una deuda impagable con la Humanidad después de haber contribuido a la zafiedad, la obscenidad y la indecencia de una sociedad que demanda a voz en cuello la extinción de la belleza. Si quería usted mi autoflagelación y arrepentimiento, ahí los tiene.
La palabra difunto viene del latín “fungere” el que ha pagado sus deudas, él ya ha pagado la deuda y accedido a la condición de “difunto” de esa carga, descansando de ella. Para todo hay enmienda, que dijo Don Quijote a Sancho.
Detecta la mano de Dios en todo esto que está ocurriendo lo que es una acusación de cooperación omisiva por Dios (no impedir lo que están pasando) por algún motivo depurativo lo que huele a acusarle para exonerarle diciendo “si es que a la vista de lo que somos no puede hacer otra cosa”. Dios es bueno pero no le dejamos manifestar su bondad por nuestra maldad, es una plegaria que dirige al creador del universo. O de los universos. Que Dios es un marajá con muchas mujeres o universos o una marajá con muchos maridos universos todos.
De su paso por la cárcel a donde fue a dar con sus huesos porque ya no podía pagar la pensión tan alta que abonó por años a la mujer, juntando la voluntad torcida del juez (porque a delincuente primario no viene obligado a encarcelar por condena no superior a dos años) dice Matomoros que
“La cárcel es una clínica de lujo que rejuvenece física y espiritualmente”, cosa que me recuerda a algo que me contó Mario Conde en la cárcel de Alcalá Meco, allá por el 2002, y me dijo que cuando por vez primera lo ingresaron (1993) y dijo a su mujer que él estaba cómodo allí que tenía tiempo para estar solo, lo que causó gran enfado en Lourdes, luego fallecida en 2007 seguramente con relación al sufrimiento de la cárcel de su marido, más sufridora ella que él.
La cárcel no es todo lo que parece, esos muros encierran la magia de sacar lo mejor y lo peor de cada humano. En lo mejor el encarcelado se vuelve más auténtico son menos “muros” (los muros curan a los muros internos como aquellas trompetas de Jericó que hacían derribar los muros, la sinceridad perdida del alma humana es otra trompeta que desintegra las paredes circundantes).
Pasando de Dios al diablo le pregunta el entrevistador por el rey de los programas de salsa rosa, “Jorge Javier Vázquez, eternamente satánico, eternamente tonto y Contesta:
– Sé que es bajar el nivel mucho, pero ¿qué opinión le merece Jorge Javier Vázquez
“La noción de que la salvación de su existencia es imposible, me llena de satisfacción y me reconcilia con mi concepto de justicia divina. El satanismo es un poder exterior que controla y dirige el comportamiento de un ser cargado de prejuicios y doctrina hueca que está aquí mostrando un nihilismo tan imbécil como enfermizo a la espera de que su sinsentido acabe”.
El genocidio de las falsas vacunas puede ser un “sacrificio necesario” le pregunta y responde.
El sacrificio, absolutamente necesario
– Pero nos va a costar cara, un genocidio planetario con las timo vacunas en el que las víctimas acuden voluntariamente al sacrificio.
Puede resultar dolorosa la contemplación del sacrificio. Pero debemos comprender que es absolutamente necesario.
Traducido a román paladino viene a decir que la muerte de los vacunados por su mala cabeza les hace perder esta como un derecho que prescribe por falta de uso. No usas la cabeza, pues la pierdes como un drástico mandato escrito por las leyes de la evolución de las miles de formas de vida.
Este planteamiento ya se hizo mucho antes de las famosas vacunas y se pensó en que tal ve una vacuna haría el papel de cribar a los despiertos de los zombis y terminar con estos.
Las ochenta páginas que se tardan en leer casi dos horas (lo mismo que Cervantes proyectaba con su primer borrador de El Quijote) abarca muchos más aspectos de los que yo entresaco lo que considero relevante.
Un libro interesante, que se puede adquirir en lulu.com. para estos tiempos de lucha contra una tiranía que se ha abierto paso a base de convertir en sicarios zombis a los representantes del pueblo y las instituciones, una distopia hecha realidad, en donde el libro se enmarca como “un arma” de guerra de liberación.