Javier de la Calle.
«Desde Liberum, hemos dado instrucciones a un abogado de Baleares, con el que tenemos contacto desde hace unas semanas, (más vale prevenir, que matar), que tome las actuaciones legales necesarias, en nuestro nombre, como Asociación por los Derechos Humanos que somos, para intentar que los chicos que están en Baleares retenidos a la fuerza, puedan volver a sus casas, con sus familias».
Para María Concepción Cuevas, presidente de Liberum, «el gobierno balear está tomando unos derroteros dictatoriales, draconianos, tiránicos, totalitarios… sin parangón. Nos parece surrealista, que un gobierno de una mísera Comunidad Autónoma, se tome a la ligera las leyes de nuestro país. Todos sabemos, en menor o mayor medida, lo que ocurrió, no hace mucho, con los menores tutelados por el gobierno balear, ¿a qué están jugando ahora?….El gobierno balear debería dimitir en bloque, si tuviese un poco de vergüenza, ¿la tienen?».
«Si no es un secuestro, lo que sí está claro es que es una retención ilegal, hay menores afectados, no cometieron ningún crimen…(salvo el ser jóvenes), que como el verano pasado, quieren hacer culpables a la juventud, de algo, que a día de hoy, ni siquiera, sabemos si existe. Debemos recordar, que desde Liberum, hemos solicitado las pruebas científicas de la existencia del virus, presentada la solicitud el 4 de mayo al Ministerio de Sanidad, a día de hoy, 28 de Junio, aún no han dado respuesta. Esperamos que nos den explicaciones, ellos que tanto presumen, de demócratas, a ver si comienzan a dar atisbo de ello, entregando las pruebas de las que dispongan, como un acto de transparencia».
Es una medida totalitaria de la dictadura sanitaria, «absolutamente sí, vivimos inmersos desde hace alrededor de 16 meses en una dictadura al más puro estilo nazi. Pero qué decimos… los nazis eran unos caramelitos comparados con los actuales gobernantes. Esperamos que paguen por todos sus crímenes, como cualquier hijo de vecino. Y recordemos, estamos viviendo en una dictadura socio-política-sanitaria, y todos son culpables, políticos, medios de comunicación, sanitarios…»