Luis Bru.
Ha sido una tomadura de pelo típicamente de la casta: Ignacio PaniAguado no se presenta a las elecciones, se escenificó su derrumbe, pero ha sido timo mentira. Según fuentes de toda solvencia de Ciudadanos, Ignacio PaniAguado ha recibido la «compensación» de cobrar un sueldo del partido naranja; una especie de premio, un regalo de forma de que no se sabe muy bien de qué ha dimitido, pero la casta es así: las retribuciones, el sueldo no puede faltar.
Por lo demás, la descripción que hacen dichas fuentes de la candidatura de Edmundo Bal es la de un «florero», por cuanto toda la lista está compuesta por personas afines a Ignacio PaniAguado y de su estricta confianza. «Son los hombres y mujeres del ex vicepresidente los que la componen, la ha hecho él». La suerte de Ignacio PaniAguado se juega a que Ciudadanos no obtenga el 5%, en otro caso el traidor seguirá cobrando un sueldo del partido para no hacer nada o se sabe qué.