Virginia Montes.
Una gran mayoría de ellos son argelinos, el resto de marroquíes, tunecinos o de origen desconocido.
Se trata de una nueva dificultad para la policía parisina: en los últimos años el número de menores no acompañados implicados en casos de delincuencia violenta se ha disparado en un 407%, de 290 a 1.471 entre 2016 y 2020, revela Le Figaro . Pero la respuesta penal es la mayoría de las veces complicada de implementar, porque estos migrantes violentos muchas veces mienten sobre su edad o su nacionalidad, para evitar su identificación y estar protegidos por la ordenanza del 2 de febrero de 1945 relativa a los niños delincuentes. especifica el diario. Para contrarrestar este fenómeno, la jefatura de policía ha puesto en marcha un sistema innovador, que revela cifras edificantes …
A partir de ahora, los agentes de policía remiten las huellas dactilares de los detenidos directamente a las autoridades de los distintos países del Magreb de donde proceden generalmente: Argelia, Marruecos y Túnez. Este último puede devolver la verdadera identidad de los delincuentes a París, dentro de cuatro a ocho semanas, detalla Le Figaro . Más de un año después de su implementación, el diario puede desvelar los primeros resultados de este método. Así, de 939 solicitudes, el Departamento de Seguridad de Proximidad de la aglomeración de París (DSPAP) recibió 229 declaraciones de identificación. Y de estos supuestos menores, 216 de ellos son de hecho mayores de 18 años, o el 96%.
Este procedimiento también permitió precisar la nacionalidad de estos falsos menores. Así, 156 eran argelinos, 71 marroquíes y dos tunecinos. Los demás son de «origen desconocido» , probablemente libios o sirios, especifica Le Figaro . Con esta valiosa información, la jefatura de policía puede iniciar trámites de “provisión de identidad imaginaria” y registrar la verdadera identidad de los infractores en el procesamiento de antecedentes penales (TAJ). Por lo tanto, pueden ser encarcelados en caso de un nuevo arresto.