Javier de la Calle.
El tapón de inmigrantes ilegales creado en Irún, tras impedir Francia la entrada de este tipo de inmigración, ha elevado la duda razonable de si se van a seguir enviando a la Península y llenar las calles de ilegales sin oficio ni beneficio que solo tienen la salida de delinquir o dejarles en Canarias y sacrificar las islas y a los canarios, porque parece que los socialcomunistas del Gobierno prefieren romper la vida de los canarios antes que deportar a los ilegales y hacer devoluciones en caliente.
FRONTEX es un engaño y no sirve para luchar contra la inmigración ilegal, sino para localizarles y traerles. Otra tomadura de pelo.
Parece que lo ocurrido en Bélgica, Suecia o Dinamarca, dónde se arrepienten de haberles acogido y donde han generado caos, no somos capaces de tomarlo como ejemplo y defendernos de un tipo de inmigración peligrosa y que no se adapta.
Canarias va camino de la destruccion si no se movilizan y exigen deportaciones ya. A la Península no envían, no paran de entrar y ya no hay hoteles para meterlos… ¿Dónde irán? Parques, playas, polideportivos, etc… Así no se puede vivir.