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Angela Molina

Redacción




Fernando Alonso Barahona. Crítico de cine.

Estoy muy, muy feliz. Ha sido una alegría inmensa, me ha llenado el corazón»

ANGELA MOLINA 

Ángela Molina nació en Madrid  3 de octubre de 1955, hija del gran artista Antonio Molina (El pescador de coplas ) y madre a su vez de artistas (Olivia Molina ). Ha superado  el centenar de películas y  ha obtenido  premios como el David de Donatello de la Academia italiana y la Concha de Plata del Festival de San Sebastián. Tiene cinco nominaciones a los Premios Goya y en 2021  ha sido galardonada con  el Goya de Honor. Cinco años antes ya obtuvo  el Premio Nacional de Cinematografía ( 2016 ). 

Su cinco nominaciones a los Premios Goya fueron: La mitad del cielo (1986), Luces y sombras (1988), Las cosas del querer (1989), Carne trémula (1997) y Blancanieves (2012).

Los Goya deben ser el escaparate del cine español, por eso es tan negativa la sectaria politización de algunos que con su comportamiento manchan la imagen de un arte que durante mucho tiempo  en España fue el más querido por el público. 

La gala 2021 – virtual por los efectos de la pandemia COVID 19 – por fortuna contaron con un presentador de lujo, Antonio Banderas, acompañado por María Casado, un puñado de buenas películas (Niñas, La boda de Rosa, con la gran Candela Peñas que mereció ganar su premio ) y el broche de oro: Goya de honor para Angela Molina. 

https://www.rtve.es/alacarta/videos/premios-goya/angela-molina-goya-honor-cuanto-mas-mayor-mas-agradecida-sientes/5812147/

Ángela  Molina debutó en el cine con el notable alegato antiabortista ‘No matarás’, del siempre interesante  César F. Ardavín en 1974. Desde entonces y con tan solo diecinueve años, su camino hacia el estrellato no conocería tregua.  

La actriz tuvo que pasar primero por el cine más o menos erótico en títulos mediocres como No quiero perder la honra (1974), de Eugenio Martín, o Las protegidas (1975), de Francisco Lara Polop. Pero enseguida llegaron personajes de mayor calado: La ciudad quemada 1976 de Antonio Ribas o Las largas vacaciones del 36 , 1976 de Jaime Camino. 

En el año 1977, Luis Buñuel selecciona  a Ángela Molina para protagonizar la película ‘Ese oscuro objeto del deseo’ con nada menos que Fernando Rey. Sería la última obra del maestro, un fascinante remake de The devil is a woman ( 1934 ) de Josef Von Sternberg que le proporciona renombre internacional y le abre las puertas del cine europeo.

Jaime Chavarri – que le entregó el Goya de honor – y Manuel Gutiérrez Aragón han sido sus directores más importantes de su etapa de espléndida madurez. A las órdenes de Chavarri protagonizó A un dios desconocido (1977), con Héctor Alterio; Bearn o la sala de las muñecas (1983), adaptación de una novela de Llorenç Villalonga; El río de oro (1985), que coprotagonizó con Bruno Ganz; y las dos entregas de Las cosas del querer (1989 y 1994), dos grandes éxitos comerciales en su momento.

Bajo la dirección de Gutiérrez Aragón realizó algunas de sus mejores interpretaciones: El corazón del bosque (1979), Demonios en el jardín (1982), con Ana Belén e Imanol Arias en el reparto y por la que obtuvo el premio David de Donatello a la mejor actriz, y La mitad del cielo (1986), que le valió un premio en el Festival de San Sebastián.

La mitad del cielo supone tal vez su culminación como actriz. La trama se desarrolla en 1940, Madrid. Una vez finalizada la Guerra Civil Española, las vidas de tres músicos se unen bajo un mismo objetivo: alcanzar el éxito. Mario Ruíz (Manuel Bandera, ‘Bámbola’), cantante y bailarín homosexual, Juan (Ángel de Andrés López, ‘Tapas’), pianista, y su novia Pepita (Ángela Molina ). Un melodrama en toda regla pero con una puesta en escena muy personal y un estilo propio que Gutiérrez Aragón sabía imprimir a sus mejores trabajos.

Con Pedro Almodóvar filmaría: Carne trémula  y Los abrazos rotos. Melodramas en estado puro y tamizados por el mundo peculiar de su autor  y con Bigas Luna la irregular pero interesante Lola. En todas y cada una de sus películas la actriz ha demostrado su profesionalidad, su talento y ese carisma imprescindible que permite a la cámara enamorarse de una mirada, de un gesto, de una palabra. 

En el cine internacional vimos a Angela Molina en títulos variopintos como  El gran atasco (Comencini), El hombre que perdió su sombra (1991) de Alain Tanner  o la superproducción 1492: La conquista del paraíso (1992) de Ridley Scott.

Ángela Molina  ha tenido cinco hijos, tres con el fotógrafo francés Hervé Tirmarche y dos con Leo Blakstad. Amante de su familia,   orgullosa de sus raíces, ha sabido recibir con elegancia el paso de los años sin recurrir a operaciones estéticas y se ha convertido en una de las grandes damas del cine español, digna heredera de las grandes del pasado: Ana Mariscal, Amparo Rivelles, Aurora Bautista, Sara Montiel, Conchita Montes o Concha Velasco ( ésta afortunadamente aún entre nosotros ). 

Entre sus últimos trabajos destacan la popular serie de ‘La valla’ para Antena 3, y ‘Días de Navidad’, disponible en las plataformas digitales. Y se ha incorporado al rodaje de la serie ‘Un asunto privado’, en la que comparte pantalla con Jean Reno, Aura Garrido y Andrés Velencoso.

Angela Molina dignifica al cine español, sin duda un Goya de honor más que merecido.