Virginia Montes.
Durante un Concejo Municipal, algunos funcionarios electos parecían más preocupados por la terminología dada a estas plagas que por la infelicidad de las personas que viven con ellas.
Es una escena casi surrealista que se desarrolló el pasado mes de septiembre durante un ayuntamiento de Estrasburgo (Bajo Rin). Interviniendo en el tema de las ratas y las chinches de “convivencia y presentación” , los miembros del Ayuntamiento hacen una propuesta de “choque” , al menos qué preguntas. ¿Por qué no cambiar la terminología asociada con estas plagas para que la opinión de los franceses cambie sobre ellas? Así, Marie-France Hamard, consejera municipal delegada ambientalista, propone cambiar la palabra “dañino” por “liminaires” o “ commensaux” para tener, “en relación con todos estos animales, un enfoque más benévolo”.
Una propuesta obviamente acogida por su colega Caroline Zorn, vicepresidenta de la Eurometrópolis de Estrasburgo, que encuentra la idea «apasionante». Tener más consideración por estos animales que a veces asolan la vida de muchos franceses sería, por tanto, más importante … Esto es lo que la oposición denunció abiertamente durante este concejo municipal, con Rebecca Breitman en mente: “No obstante, debemos hacernos la cuestión de saber si queremos ayudar a las personas que conviven con ratas y chinches, en situaciones insalubres, en lugar de si debemos realizar una campaña de anticoncepción para ratas ”, denuncia el agregado parlamentario (Strasbourg Ensemble).
» Eso no tiene sentido «
Continúa dirigiéndose a Marie-France Hamard: “Hagámonos las preguntas correctas. Cual es la prioridad? […] Necesitamos reenfocarnos en las prioridades reales, las de las personas que están en situaciones catastróficas y quizás no las de las chinches que se agachan en la almohada de nuestro vecino y nos preguntan si deberíamos ‘llamar’ vecino ‘,’ compañero de piso … eso no tiene ningún sentido ”, se ríe el presidente del Movimiento Europeo de Alsacia.
Por el lado de los ecologistas, insistimos y firmamos, Marie-France Hamard creyendo que los animales son «incapaces de volver a vivir en libertad» . Luego evoca una «regulación suave» para «convivir a largo plazo con los animales» … Al final, seis meses después, nada parece haber cambiado. Según un artículo de Latest News from Alsace (DNA) del 24 de febrero, las ratas colonizaron un edificio en Neudorf (distrito de Estrasburgo). Están por todas partes en sótanos y botes de basura; los inquilinos y el propietario están «pasando la pelota» .