Ariadna Cabrera.
Se les ve venir, está más vistos que el tebeo, parece como si los teledirigieran: 1) crean el problema y marean la perdiz echándose los políticos la culpa unos a otros, diluyendo las responsabilidades; 2) después echan la culpa a los ciudadanos, a los canarios, llenándoles de improperios; 3) después lanzan el bulo de que todos son bulos, aquí han llegado, el delegado del Gobierno, Anselmo Pestana, hasta la incongruencia de que con inmigrantes baja la inseguridad ciudadana (ocultado la violación de la joven canaria); 4) luego intentan el blanqueo, eso de los niños y los vulnerables, para lo que cuentan con la jaula de grillos de las ONG, todas a sueldo; 5) aparecen los tres gatos de alguna asociación, próxima a algún partido político, en esta caso Coalición Canaria, diciendo lo mismo que los políticos, dispuestos a pillar alguna subvención. Aquí, en Canarias, han quemado todas las etapas y están cada vez más histéricos.
La sublevación canaria contra tanta mentira se inició en el barrio de Las Rehoyas y tomó el relevo, amplificándolo exponencialmente, la Isleta, al grito de «no es inmigración, es invasión». Pues los tres aprovechados de siempre, tres gatos, que no representan a nadie más que a ellos mismos, aparecen generando confusión y tienen sus diez minutos de mierda, parafraseando escatológicamente a Andy Warhol. Quienes han cumplido esa desmerecida misión responde al nombre de Foro de la Isleta, Manolo Cabezudo, Félix Alonso y Jorge Pulido, para que se les caiga la cara de vergüenza y desenmascararlos ante todo el mundo. Dicen: a) que no tienen ni idea de inmigración, b) se muestran dispuestos a integrarlos en La Isleta. Si son ilegales, ¿qué integración cabe si no la deportación? La única propuesta en que les pongan una zona Wifi en el Canarias 50.
Pelotas de los políticos se reúnen con el delegado del Gobierno, y representantes del Ayuntamiento de Las Palmas, el Ministerio del desastre y los que hacen negocio con el sufrimiento humano, la Cruz Roja. Los tres gatos han cumplido su misión, han salido en los medios y han cobrado los servicios prestados. Los tiran al cubo de la basura o al vertedero y no se sabrá más de ellos. Felpudos gastados de la casta parasitaria.