Javier de la Calle.
He aquí el peligroso grupo que tanto asusta al todo poderoso líder de la extrema izquierda, Pablo Iglesias, y que se juntan para pasear cada tarde el la zona de Riomonte en Galapagar.
Esta es la justificación para apropiarse de varios cientos de metros de calle pública y decidir cuándo la pueden utilizar los vecinos y quién sí y quién no.
Como se puede ver, la mayoría ronda entre 60 y 70 años, todo un peligro y justificación para las actitudes de ese grupo de falsos héroes vestidos de verde y que son la vergüenza para sus propios compañeros.
Si el incompetente alcalde de Galapagar sigue sin exigir que se respete el derecho a la libre circulación en su pueblo, es la Comunidad de Madrid quién debe defender este derecho y no permitir que los caprichos totalitarios del comunista continúen.
No, los guardias civiles de Galapagar nada tienen que ver con esta vergüenza.
Se trata de un grupo elegido por los mandos de la Compañía de El Escorial y se les distingue porque son los únicos de esa zona que llevan Seat León como coche patrulla.