Luis Bru.
«Se están dando de baja en masa, es una desbandada total», afirma una fuente interna de El Español que prefiere mantener el anonimato. Desde que Hermann Terstch lanzó su boicot al digital de Pedro J Ramírez, donde más le duele, se ha producido lo que definen las fuentes internas informantes como «una estampida». No sólo son votantes de Vox, según nuestran fuentes, sino gente de toda ideología que no están de acuerdo con que a los votantes se les llame «maltratadores» y están en contra de esa manifiesta manipulación.
Se consideran timados los suscriptores de El Español por su línea ideológica, que difiere sustancialmente de la fundacional. Por la apuesta por las posturas más radicales y absurdas del feminismo -lo que se conoce en el argot como «feminazi»-, y por la sumisión completa a todos los dictados de lo políticamente correcto.
En 2016 Pedro J facturó 825.875 euros en concepto de suscripciones. La bajada fue importante en 2017: 676.761. En 2018 hubo un auténtico descalabro pues sólo consiguió obtener 586.566 euros, según los datos suministrados por la empresa al Registo Mercantil. El próximo año estaremos muy atentos a este dato, que puede aproximarse a cero, también por la deficiente oferta que hace. «Pedro J se ha malquistado con su público objetivo y se dirige a otro inexistente. Su crédito está acabado», comenta un analista de medios de comunicación.