Josep Sansano.
El abogado alicantino José María Bueno juega en las Ligas mayores. Es el abogado elegido para representar a Miguel Bernad, secretario general de Manos Limpias, en el juicio que está previsto celebrar el día 21 de octubre en la Audiencia Nacional, uno de los más esperados y más importantes.
Tarea difícil y no por la claridad de la inocencia de Miguel Bernad, un hombre justo, toda una referencia en la lucha contra la corrupción, sino por la obsesión de eso vago y difuso que se llama sistema en perseguir a Miguel Bernad, un auténtico linchamiento, que tuvo su punto álgido en los ocho meses de prisión preventiva, a los que fue «condenado» Bernad, sin pruebas ni siquiera indicios. Juega en su contra la exageración de las apariencias, la voluntad del sistema de no reconocer su error de ensañamiento.
José María Bueno, el mejor abogado de España, una buena elección de Miguel Bernad, tras dar tumbos noqueado con malos abogados, cuenta con su acreditada profesionalidad para afrontar a los leones judiciales, que quizás no le perdonan a Miguel Bernad el has sentado en el banquillo a una Infanta de España, y por eso habñia que recurrir a inventos, a los que se prestaron toda la jauría de medios de comunicación. Pero, ¿dónde está el dinero de los supuestos chantajes? ¿Por qué casi ninguno de los testigos dice conocer a Miguel Bernad? La Justicia se basa en hechos y estos no cuadran. ¿Se reconocerá que todo fue un montaje?
Un trágico imprevisto de última hora puede suspender el juicio: Miguel Durán, abogado de Luis Pineda, ha sufrido un infarto y ha sido operado a corazón abierto. Ha pedido una suspensión por tres meses. Lo lógico es que se la concedan, porque no es cuestión que Durán asista entubado y llevado en ambulancia.
José María Bueno, en todo caso, está preparado. Su presencia da seguridad. Y es un honor para Alicante: un alicantino en la Corte.