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Elisa Beni hace apología de la violación y se queda tan ancha

Redacción




Luis Bru.

Parece mentira que algunas opiniones se evacúen; otra cosa no se puede decir, porque son propias de un mingitorio. Pero se evacúan y no se utiliza papel higiénico para limpiarse. Más escandaloso es que las digan personas con relevancia pública, cuyas opiniones se expresan por las televisiones.

Entre las histéricas bocachanclas se lleva la palma Elisa Beni. Es indecente las opiniones que lanza está desquiciada. No son unos «niñas inocentes» sino adolescnetes que con mucha frecuencia mienten en su edad y tiene más años que Matusalén. No son, desde luego, «inocentes» puesto que han violado a «una chica», y es de traca, si no fuera perseguible por la justicia, está apología de la violación, que «ellos vienen de otra cultura diferente y no saben que eso está mal, lo tenemos que comprender y respetar». Ello nos llevaría a «comprender y respetar» la lapidación de las adúlteras, el asesinato de los gays y transexuales, la esclavitud sexual de las yazidíes y el exterminio de los no musulmanes. Tendría que ser partidaria de los latigazos a las mujeres que enseñan muslo y visten provocativas, según sus criterios. El «multiculturalismo y la diversidad» tienen límites bien precisados en el Código Penal.

Eso no se lo dice Elisa Beni a la joven que ha sido violada en nombre del multiculturalismo y la diversidad. ¿O es que acaso tendría que sentirse feliz y dar gracias por ser violada? ¿Debería dar ejemplo Elisa Beni y ofrecerse a ser violada por esos niños inocentes que vienen de otra cultura diferente y no saben que eso está mal? ¿Tendríamos que comprender y respetar en ese caso un acto tan execrable? La «España progresista» de la que habla Elisa Beni se parece bastante a una España desquiciada. La «España progresista» y el multiculturalismo y la diversidad no puede justificar el delito y menos tan execrable como la violación. Ábramos, pues, las puertas a los violadores. ¡Y qué tenga altavoces para hablar Elisa Beni!