Fernando Alonso Barahona. Crítico de cine.
La nueva franquicia de Spiderman en Marvel se iniciaba con El regreso a casa del héroe adolescente moldeado por nada menos que Iron Man, el carismático señor Stark. Claro que los seguidores de Spiderman en su etapa contemporánea tienen aún presente el primer Spiderman que dirigiera con fortuna Sam Raimi y cuyo éxito propició varias continuaciones todas con excelentes resultados en taquilla.
Spiderman cambió de saga y de actor para convertirse en The amazing spiderman para gozo de sus millones de seguidores en todo el mundo. Y ahora convertido en Spiderman adolescente e integrador en los avatares de los Vengadores aparece de nuevo con un estilo cercano, toques de humor y por supuesto mucha acción. Un cóctel preparado para el público de la nueva generación de “ moviegoers” cada vez con edades más cortas.
Se ha escrito con acierto que el Universo Marvel ya no es una parcela dentro del cine de superhéroes. Es una concepción en sí misma del propio cine. Es un universo con vida y estilo sobre el cual aletean los distintos superhéroes, auténticos hacedores de sueños de la última generación de adolescentes y jóvenes del siglo XXI.
El argumento es líneas y claro:
Peter Parker decide pasar unas merecidas vacaciones en Europa junto a MJ, Ned y el resto de sus amigos. Sin embargo, Peter debe volver a ponerse el traje de Spider-Man cuando Nick Furia le encomienda una nueva misión: frenar el ataque de unas criaturas que están causando el caos en el continente. Claro que en el corazón del peligro tendrá que enfrentarse con la traición de un superhéroe corroído por la vanidad y la egolatría.
Dirigida por Jon Watts con Tom Holland, Jake Gyllenhaal, Zendaya, Jacob Batalon, , esta nueva entrega de la franquicia Spiderman ha arrasado en taquilla y garantiza la continuidad de historias y personajes.
El principal núcleo dramático de esta película de acción es el proceso iniciático del protagonista para asumir que con solo 16 años y tras la desaparición de Tony Stark ha de asumir la responsabilidad de un vengador. Este tema es explorado con brillantez y sutileza en la película desde la misma escena de apertura donde el tema musical se tiñe por unos instantes de nostalgia . Peter Parker además quedará prendado de una jovencita aunque el deber le hará colocar su misión por encima de cualquier otra cosa. El niño, el joven, se convierte en hombre y así se transmite en el transcurso de la historia hasta su mismo y espectacular desenlace.
Spider-Man reúne todas las mejores cualidades de los superhéroes —valentía, abnegación, fortaleza— y al mismo tiempo las características más humanas —miedo, inseguridad, cierta torpeza emocional—.
Tom Holland encarna con veracidad al personaje y si ya en Vuelta a casa (Homecoming ) conquistaba con su simpatía ahora en Lejos de casa (Far from Home ) acepta su identidad como héroe al estilo de los héroes inolvidables del cine clásico.
Puede que no haya excesivas novedades en esta película fiel al mundo Marvel; la trama es sencilla y destila humor: los acompañantes de Peter en el viaje de placer, el avión, el hotel que estará lleno de misterio, las chicas que aúnan encanto y valor. Así hasta que la amenaza se concreta y la ciudad comienza a ser atacada por monstruos que parecen irreales, creaciones de un personaje diabólico con el que Spiderman debe medir sus nuevas armas.
Tal vez sea difícil apreciar su encanto si no se ve acompañado por algún niño o preadolescente que entre el festin de palomitas y Pepsi se emociona con las aventuras del héroe juvenil. Pero si se cumple este requisito el disfrute de Spiderman (Far from Home ) está asegurado.