Redacción.
Con motivo de la publicación del polémico libro titulado El triunfo de Ágatha Ruiz de la Prada en el que describe la situación existente entre el periodista riojano Pedro J. Ramírez, su actual esposa Cruz Sánchez de Lara y su ex-pareja la diseñadora Ágatha Ruiz de la Prada Enrique de Diego ha concedido una entrevista a Ebro7, una exitosa televisión local. En ella afirma que «Pedro J está acabado».
Ebro7: Has definido a Pedro J. Ramírez como un periodista que se encuentra ya en su etapa “crepuscular”. ¿En qué se diferencia el comunicador riojano de hoy con el de hace veinte años?
Enrique de Diego: A las pruebas me remito. Es ahora un ángel caído con un digital en la ruina, que iba dar beneficios al tercer año que plantea la primera ampliación de capitales, con un fracaso en la política de suscripciones con 825.875 euros de ingresos en 2016 y cayendo a 676.791 euros en 2017 y que contabiliza como activo ficticio un impuesto diferido de 2.348.849,06 euros. Y cuya audiencia no tiene ninguna credibilidad al ser la suma de varios digitales, el último uno de vídeojuegos. Es un periodista que no ha sabido retirarse a tiempo.
Bajo la dirección del riojano, El Mundo fue considerado como uno de los grandes medios de investigación y destapó numerosos escándalos de corrupción. Sin embargo, fuiste uno de los críticos más fieros del diario de Unidad Editorial por sus investigaciones y exclusivas sobre los atentados del 11-M…
Da grima tener que referirse al 11-M como una investigación. No se investigó nada. Todo fue un invento abracadabrante. Situó a Emilio Suárez Trashorras como un bendito, víctima de una conjura, y él mismo ha manifestado que fue el que suministró los explosivos; a Jamal Zougam como un pobre inocente, nuestro Alfred Dreyfus, y van y le detienen por montar el Daesh en las cárceles. Es la mayor mentira montada en el periodismo español. Una parte de la derecha ha seguido esa patraña y de ahí vienen sus males…