Javier de la Calle.
Sin investigación, sin rastreo informático para detectar los autores del escandaloso pucherazo a favor de la rutilante Silvia Clemente, Ciudadanos se ha visto obligado a intentar parar el escándalo proclamando como candidato a la Junta de Castilla y León al exdiputado Francisco Igea.
El sábado, la formación naranja proclamaba como candidata a Silvia Clemente, que había sido apoyada por el secretario general, José Manuel Villegas, por Miguel Gutiérrez, por Juan Carlos Girauta y Luis Fuentes, tanto el aparato nacional y regional que habían presentado a la expresidenta del Parlamento regional como su fichaje estrella. Sin embargo, la votación de las primarias emitían señales de alarma claras de que alguien había jugado sucio y lo había hecho a favor de Silvia Clemente. Los votos emitidos eran 1.013 mientras la suma de los votos recibidos por los tres candidatos sumaban 1.084. Una diferencia de 81 votos, todos ellos en bloque a favor de Silvia Clemente, registrado en la madrugada del viernes al sábado, en el momento en que Igea, médico vallisoletano, sacaba una clara ventaja.
Estamos ante un claro caso de pucherazo que pone en cuestión el sistema telemático de recuento controlado por el secretario de organización de Ciudadanos, Francisco Hervías. Silvia Clemente, además, había sido acusada de transfuguismo y de presunta corrupción en relación con las subvenciones concedidas a su pareja Javier Meléndez en el tiempo en que fue consejera de Agricultura.
Carta a Silvia Clemente: Condesa de Romanones con perfumes de Al Capone