Javier de la Calle.
La distancia entre el discurso buenista de la casta y la realidad es abrumador. Según informa el portal Mira Jerez, dos magrebíes se dedicaron en la noche del sábado al domingo a agredir a cuantos pasaban por la calle céntrica y petaonal San Pablo, en Jerez de la Frontera, y luego la emprendieron con los porteros de una discoteca, a las 00.30 horas de la madrugada.
Según ha podido saber MIRA Jerez, al parecer los porteros negaron la entrada al establecimiento a dichos individuos debido a que en fechas anteriores habían ocasionado molestias, siendo conocidos en establecimientos de los alrededores por los mismos motivos.
Acudieron en primer lugar dotaciones de Policía Local, siendo apoyados minutos más tarde por varias patrullas de Policía Nacional.
Los agentes municipales, una vez evaluadas las lesiones, procedieron a la detención de los agresores, quienes fueron trasladados a Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía, quedando en los calabozos a en espera de ser puestos a disposición judicial.
Por su parte, los controladores acudieron al hospital para asistirse de las lesiones causadas por dichos individuos, recibiendo uno de ellos hasta 7 puntos de sutura en el abdomen por un profundo corte con cristal.
Los testigos apuntan a que la situación fue dantesca, mostrándose ambos agresores muy violentos y agresivos: “Pasar por la calle era muy peligroso, pegaban a todo el que se les cruzaba. Estaban muy fuertes, musculados, iban a matar”.
La reacción de ambas personas a la negativa al acceso del pub fue la de agredir a los dos controladores, ocasionándoles heridas en la cara y a otro en el costado con un gollete de botellín de cristal roto. Además, uno de los ‘porteros’ mientras intentaba reducir a uno de los agresores recibió repetidos golpes con bancos de madera en su cabeza, resultando herido de consideración.