AYÚDANOS A COMBATIR LA CENSURA: Clicka aquí para seguirnos en X (antes Twitter)

FIRMA AHORA: El manifiesto contra el genocidio de los niños


Carta a Dani Mateo: Nunca te olvidaremos, capullo

Redacción




Enrique de Diego.

Vaya, Dani Mateo, has conseguido lo que buscabas. Ya eres una celebrity, uno de los más famosos de España, ya están en condiciones de levantar la silla a Monzón. Al final vamos a tener que estarte agradecidos por haber producido el beneficioso efecto homeopático de mostrar la potencia del patriotismo y provocar su resurgimiento. ¡Oh, mia Patria! Allá por donde vas levantas pasiones -Ciudad Real- haciendo sonar el himno nacional y con un flamear de banderas.

No deberías mostrarte tan quejica y tan cobardica. Al fin y al cabo, la provocación gratuita lo que busca es generar polémica y aumentar la audiencia. Lo has conseguido. Deja de gimotear y de esconderte detrás de los guionistas. Luego está lo de las amenazas. A los progres se os da de hongos haceros las víctimas. Desde que tengo uso de razón, el 99,99% de las amenazas y agresiones provienen de la izquierda. Recuerda, Dani, capullo, el asesinato de Víctor Laínez en Zaragoza por el cobarde de Rodrigo Lanza, adicto a El Intermedio, por el mero hecho de llevar Víctor en los tirantes esa bandera de España en la que tú te suenas los mocos, pedazo de guarro. Previamente había dejado parapléjico a un guardia urbano de Barcelona, pero para los tuyos ese degenerado era un héroe social. Podemos poner en el criminal haber de la izquierda los asesinatos de ETA o los asesinados por el Grapo, una de cuyas mayores asesinas, con nueve muertos a las espaldas, es homenajeada y se la da tribuna en Zaragoza por medio de una entidad que recibe un millón de euros de subvenciones del podemita Santisteve. Hacéis negocio de todo, hasta de los crímenes.

NO TE LO PIERDAS:   Toda la mentira de Mariano Rajoy puede venirse abajo

Pongamos, claro, en la balanza al presunto ultraderechista Manuel Murillo Sánchez, quien dicen que quería atentar contra el presidente del Gobierno y parece más bien que quería ligar con una patética y estrecha coordinadora local de Vox –estos de Vox con tal de salir en los papeles son de gatillo fácil- haciéndose el machote. Vaya patrañita, Dani. Vaya guionistas más malos. Y, de inmediato, a prisión preventiva, para rodearos de una impúdica aureola de martirio, como Pablete Iglesias al que tienen que cantar una nana una dotación de la Policía Nacional.

Pero están lo de las amenazas. ¿Qué amenazas? ¿Hay alguna denuncia? Se han suspendido dos sesiones de tu mierda de comedieta en el Teatro Olympia de Valencia y, al final, todo parece que se debe a que se iban a manifestar los de España 2000, que es gente que se dedica a dar techo, comida y atención a indigentes, cosa que no hacéis ni tú ni tu jefe, José Miguel Monzón, en vuestros pisos, que encima resulta que tú, capullo indecente, los escondes detrás de sociedades instrumentales. Pedazo de hipócrita.

A la carrera ha salido el sistema a tú rescate, porque tú, Dani, no eres más que un lacayo, un tiralevitas, un abrazafarolas y un lameculos; tú nunca provocas a los poderosos, sólo a las buenas gentes indefensas, a esos patriotas que se levantan cada mañana para sacar adelante esta nación en la que puedan vivir payasos como tú, y que me perdonen los payasos. Ha salido el viejo comunista del viejísimo comunismo genocida Joan Ribó –una vergüenza para Valencia- ofreciéndote alfombra roja en el Palau de la Música, porque tú, Dani, no eres un disidente, eres personal de servicio de la casta. Y ahora el debate, con la concejala Gloria Tèllo, otra que vive del momio, es cuánto va a costar la entrada, aunque con cargos, carguillos y carguetes del Ayuntamiento y paniaguados de la Generalitat el lleno está asegurado. Al fin y al cabo, esta es una España de burócratas y parásitos, a los que tú sirves.

NO TE LO PIERDAS:   Victoria del patriotismo sobre los bufones y sus amos

Tengo hecha la promesa de ir a tu bareto, que con tanto fervor del público hemos desvelado en Rambla Libre, a sonarme los mocos en los manteles, mear en los vasos de tubo y defecar en las albóndigas. Al fin y al cabo, Dani, como tú dices, maestro, “la comedia no morirá nunca”. Y, además, lo manda el guionista. Eres un consentido del sistema. Nunca te olvidaremos, capullo.