Público y La Vanguardia lo califican de lobo solitario. Había mostrado su intención de atentar contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez y para ello había pedido en un grupo de whassapp si alguien tenía información sobre la agenda del presidente. Se trata, por tanto, de una intención en estado muy inicial y que estaría motivada por el rechazo a la exhumación de los restos de Franco del Valle de los Caídos. Los Mossos d’Esquadra detuvieron el pasado mes de septiembre en Terrassa.
Al entrar en su vivienda el pasado 19 de septiembre, los agentes hallaron 16 armas de fuego cortas y largas, incluido un fusil de asalto militar Cetme, un subfusil ametrallador checoslovaco Skorpion vz. 61, y cuatro rifles de altísima precisión, capaces de acertar un blanco a un kilómetro de distancia. Además, en su coche llevaba dos pistolas, una de ellas modificada de forma ilegal.
Manuel Murillo Sánchez está actualmente en prisión provisional en el Centro Penitenciario Brians-2, en Sant Esteve Sesrovires, donde confesó nada más ingresar sus intenciones de atentar contra el jefe del Ejecutivo. De hecho, había confesado su despreocupación por el hecho de acabar en prisión. Estaba dispuesto a “sacrificarse por España”, tal y como avanza Público.